Edición Médica

Valeria Castillo, abogada en Ds Legal Group.

En el vertiginoso mundo de la atención médica, donde la confianza y la seguridad son pilares fundamentales, cada detalle cuenta. Cada dia son más las dudas por parte de la autoridad reguladora sobre ¿Qué sucede detrás de las puertas de los consultorios y centros médicos en los que confían para cuidar de la salud? Más allá de la cálida bienvenida y la sonrisa reconfortante del personal, existe un elemento esencial que asegura la tranquilidad y confianza: el permiso de funcionamiento, el mismo que fue establecido por Ley Orgánica de Salud en su artículo 130.

El permiso de funcionamiento no es simplemente un requisito impuesto por el ACESS; es un sello de garantía que asegura que un consultorio o centro médico cumple con las regulaciones y estándares establecidos por las autoridades de salud. Este permiso se emite después de una rigurosa evaluación que abarca aspectos básicos con los que debe contar un centro de atención médica; como la infraestructura, la revisión de la acreditación académica por parte del profesional, el control de residuos y la disponibilidad de equipos médicos adecuados.

Según la lista emitida por el ACESS, deben contar con este permiso: establecimientos de salud, consultorios médicos generales y de especialidad, centros odontológicos, obstétricos, psicológicos, hospitales generales, hospitales del día, laboratorios de diagnóstico, centros de rehabilitación física y todos aquellos que estén relacionados a las artes médicas y de bienestar.

El incumplimiento de esta norma genera una sanción con multa, así mismo, de la clausura del establecimiento que funcione sin la debida acreditación. El permiso de funcionamiento contribuye a la regulación del sector de la salud al garantizar que los consultorios médicos operen de manera legal y ética. Esto ayuda a prevenir la proliferación de establecimientos médicos no autorizados y mejora los estándares del servicio médico.

Es de suma importancia mencionar que el ACESS está llevando a cabo estrictos controles para verificar que todos los centros médicos cuenten con el debido permiso de funcionamiento, lo que ha resultado en un considerable número de multas para algunos establecimientos de salud.

Los permisos de funcionamiento tienen una validez de un año, lo que genera la necesidad de renovarlos de forma periódica. Es crucial tener en cuenta que cualquier retraso en este proceso de renovación conlleva sanciones, al igual que no contar con el debido permiso; por lo que es fundamental estar atentos a las fechas establecidas por la autoridad reguladora.

En caso de dudas por parte de los profesionales o establecimientos de salud y de requerir asistencia legal para la obtención, renovación o información acerca de los permisos de funcionamiento, desde DSLEGAL GROUP estaremos gustosos de asesorarlos como despacho jurídico especialista en derecho médico a nivel nacional al teléfono de contacto 045150715.