Desde el Área Legal
La importancia de la salud mental en el ámbito sanitario
Viernes, 19 de julio de 2024, a las 14:43
Andrea López, abogada en Ds Legal Group
La salud mental es un derecho humano fundamental y un elemento esencial para el desarrollo personal, familiar, comunitario y socioeconómico. Su importancia radica en alcanzar un equilibrio emocional interno, externo, vinculado al medio ambiente en que las personas nos desenvolvemos, para hacer frente a los momentos adversos de la vida, desarrollar habilidades, poder aprender y trabajar adecuadamente y contribuir a la mejora de la comunidad.
En el ámbito sanitario los médicos y enfermeras desempeñan roles cruciales en el bienestar de la población, pero frecuentemente enfrentan desafíos significativos que afectan su propia salud mental.
Para abordar esta situación, en Ecuador, la protección de la salud mental de los médicos está respaldada por varias normativas legales partiendo de la Constitución en su artículo 32, el mismo que, reconoce el derecho a la salud integral, incluida la salud mental, de la misma manera, la Ley Orgánica de Salud, establece disposiciones específicas para promover y proteger la salud mental en el ámbito sanitario, incluyendo la creación de programas de bienestar y prevención de riesgos psicosociales en el trabajo.
La legislación más reciente que destaca es la Ley Orgánica de Salud Mental publicada el 05 de enero del 2024 en Registro oficial 471, misma que tiene por objeto establecer un marco legal para la salud mental que promueva, regule y garantice el pleno ejercicio del derecho a la salud mental de las personas en todo su ciclo de vida bajo un modelo de atención integral y comunitario.
Esta Ley marca un hito importante al establecer por primera vez en el Ecuador de forma clara los derechos en salud mental de los ciudadanos. De igual manera, el estado ecuatoriano a través de esta Ley garantiza a las personas que requieran atención en salud mental los servicios, tratamientos y medicamentos, basados en la mejor evidencia científica para prevenir, promover, conservar o recuperar su salud mental. El financiamiento de estos servicios se realizará en la Red Pública Integral de Salud, según la Constitución, la protección para personas que requieran atención de salud mental y estén abandonadas implementando acciones de fortalecimiento de redes de apoyo.
La salud mental en el ámbito sanitario no solo debe cobrar importancia únicamente tras un diagnóstico, es decir, resulta indispensable procurar el bienestar mental desde la prevención y promoción. Como muestra en España existe el Programa de Protección y Atención integral al Médico Enfermo (PAIME), mismo que asiste de manera integral a los médicos que sufren problemas psíquicos y/o conductas adictivas para poder asegurar que reciben el tratamiento adecuado y en consecuencia, puedan ejercer la medicina en las mejores condiciones posibles para la salud de sus pacientes.
Es crucial dejar de estigmatizar las enfermedades mentales dentro de la comunidad médica, esto permitirá que los profesionales de la salud busquen ayuda cuando sea necesario sin temor a represalias o juicios negativos. De hecho, conforme a estadísticas realizadas en 2019 por el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos España señalan que las especialidades que presentan una mayor incidencia de trastornos de ansiedad, depresión o adicciones a más de los médicos de atención primaria también son psiquiatría, anestesiología y algunas ramas de la cirugía. El grupo actualmente con más incidencia es el de los menores de 30 años, seguido de los médicos de entre 41 y 50 años.
En conclusión, la carga de enfermedades mentales está aumentando en todo el mundo, con un impacto significativo en la calidad de vida de individuos y comunidades, la falta de tratamiento adecuado puede acarrear a consecuencias graves, como el suicidio, que ha mostrado cifras preocupantes en ciertos grupos demográficos especialmente en la zona centro del país.
Es de vital importancia prevenir los trastornos mentales, proporcionar atención integral, promover la recuperación y garantizar el ejercicio pleno de los derechos humanos, participación intersectorial, de las personas naturales y jurídicas de derecho público o privado, la familia y la comunidad. Por otro lado, al priorizar el bienestar emocional de quienes cuidan de otros, no solo estamos protegiendo a nuestros proveedores de salud, sino también, fortaleciendo todo el sistema de atención médica para beneficio de la población ecuatoriana en su conjunto.