Bacterias manipuladas liberan fármacos contra tumores
El objetivo es saber si se podía crear un
Jeff Hasty, profesor de la Universidad de San Diego.
|
Redacción. Quito
Un estudio reciente ha revelado una nueva técnica de biología sintética permite manipular genéticamente bacterias que, probadas en ratones, son capaces de liberar medicamentos contra el cáncer a la vez que se controla, a lo largo del tiempo, el tamaño de la colonia de esos microorganismos.
El grupo de investigadores de la Universidad estadounidense de San Diego y del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han presentado esta nueva estrategia para usar biología sintética con fines terapéuticos.
Jeff Hasty, profesor de la Universidad de San Diego, y su equipo manipularon una bacteria para producir medicamentos contra el cáncer y luego autodestruirse liberando el fármaco en el lugar donde se encuentran los tumores.
Una vez puesta a punto, la tecnología fue enviada a los científicos del MIT para probarla en un modelo animal de ratones con metástasis colorrectal.
Según un comunicado de la universidad, aún es necesario un trabajo adicional antes de que una bacteria pueda emplearse como una terapia efectiva contra el cáncer. Además, los investigadores indicaron que con este nuevo enfoque aún no se ha curado a ningún ratón, pero puede suponer un aumento del 50 por ciento en la esperanza de vida del roedor, aunque es difícil anticipar cómo se podría traducir en personas.
“Este estudio, culminación de cuatro anteriores de la Universidad de San Diego, ofrece un enfoque terapéutico que minimiza el daño a las células circundantes del tumor”, ha señalado Hasty.
El objetivo del equipo era saber si se podía crear un "circuito asesino genético" para controlar una población de bacterias, minimizando así su crecimiento a la vez que suministraban una carga importante de medicamento en el lugar donde se localizaba el tumor.
Para esto, Hasty ha empleado un enfoque de la biología sintética para manipular un circuito genético, grupos de genes que inciden los unos en otros, que controla la liberación de medicamentos en una bacteria de la cepa de la salmonella y que tiene como objetivo un tumor.
Los investigadores sincronizaron las bacterias para liberar cargas de medicamentos para el cáncer cuando la colonia de estos microorganismos se autodestruía en las cercanías de un tumor.
El uso de las bacterias in vivo "es tentador porque la quimioterapia convencional no siempre llega a la regiones internas del tumor, pero las bacterias pueden colonizarlas", ha explicado el comunicado de la Universidad.
Así, los investigadores observaron que la combinación de quimioterapia y esta nueva técnica reducía de manera constante el tamaño del tumor.
Los autores del estudio proponen que este nuevo enfoque puede ayudar a usar las herramientas de la biología sintética para aprovecharse de la tendencia de ciertas bacterias a colonizar los lugares del cuerpo afectados por una enfermedad.