Sugieren nuevas guías para reducir infecciones en cirugías
En una investigación se detallan los procedimientos a seguir
Kristen A. Ban, investigadora de la Universidad de Chicago.
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Redacción. Quito
Kristen A. Ban, residente en el departamento de cirugía del
Centro Médico de la Universidad de Loyola de
Chicago ha presentado una actualización en una serie de guías para la prevención, detección y manejo de infecciones del sitio de la cirugía, las cuales afectan a hasta 300.000 pacientes por año en los
Estados Unidos.
Las directrices detallan las últimas pruebas de las medidas que los pacientes, cirujanos y hospitales pueden hacer para
prevenir las infecciones, como dejar de fumar (recomendado), afeitar el sitio quirúrgico (no se recomienda, a menos que el cabello interfiera con la cirugía) y ducharse después de la cirugía (no aumenta el riesgo de infecciones).
Según el estudio las
infecciones del sitio quirúrgico (SSI por sus siglas inglés) incluyen infecciones en el área de la piel donde se realiza la incisión, infecciones por debajo de la incisión en los músculos y tejidos que rodean a los músculos e infecciones en otras partes del cuerpo involucradas en la cirugía.
“Las SSI son las más comunes y costosas de todas las infecciones adquiridas en el hospital y representan el 20 por ciento de todas las que que se reportan en el hospital. Se producen en un estimado de 2 por ciento a 5 por ciento de los pacientes sometidos a cirugía” ha indicado el estudio.
Además, la investigación revela que la incidencia anual estimada de SSI en los Estados Unidos oscila entre
160.000 y 300.000 casos y el costo anual estimado estaría entre 3.500 y 10.000 millones de dólares. En promedio, una infección del sitio quirúrgico aumenta la duración hospitalaria de la estancia entre 9 y 7 días, según los estudios citados en las directrices.
Recomendaciones
Independientemente del tipo de cirugía,
los fumadores y ex fumadores están en mayor riesgo de SSI. Los cirujanos deben aconsejar a los pacientes que se abstengan por completo de fumar durante un mínimo de cuatro a seis semanas antes de la cirugía electiva.
Adicionalmente el
control a corto plazo de glucosa en sangre (azúcar en la sangre) antes, durante y después de la cirugía es más importante que el mantenimiento a largo plazo del azúcar en la sangre. Ahora hay pruebas de alta calidad para apoyar la expansión del control de azúcar en la sangre a todos los pacientes, independientemente del estado diabético.
Respecto a los antibióticos tópicos y locales los estudios de procedimientos individuales han mostrado resultados prometedores cuando se usan antibióticos tópicos y locales para reducir las infecciones, pero se necesitarían
grandes ensayos clínicos aleatorios de una gama más amplia de procedimientos antes de apoyar un uso más generalizado o recomendaciones formales.
La investigación también ha sugerido que el pelo en el sitio quirúrgico debe ser removido sólo si interfiere con la cirugía. “El afeitado provoca cortes microscópicos y abrasiones, lo que resulta en la disrupción de la defensa de la barrera de la piel contra los microorganismos. Generalmente se deben utilizar
máquinas de cortar pelo en lugar de maquinillas de afeitar para quitar el cabello”.
Finalmente, las guías no han recomendado el uso de suturas antibióticas para disminuir los SSI, pero ahora hay evidencia considerable para apoyar su uso.
"Los guantes quirúrgicos pueden contener o desarrollar defectos. El doble guante disminuye el riesgo de agujeros en el guante interior, por lo que se recomienda
guantes dobles de rutina para proteger al cirujano. También ningún estudio ha demostrado una diferencia en SSI entre los pacientes que se duchan 12 horas después de la cirugía y los pacientes que demoran la ducha durante más de 48 horas. La ducha temprana no aumenta el riesgo de SSI y puede ser estimulada a discreción del cirujano" ha puntualizado la guía.