Edición Médica

José Ignacio Vallejo, abogado en DS Legal Group.

Redacción. Quito
La pandemia a causa del COVID-19 ha promovido significativamente que los pacientes busquen atención en salud a través de herramientas de telemedicina en Ecuador y en todo el mundo.
 
Esto representa un gran avance para la práctica médica y desde lo Gubernamental se han dado pasos importantes para aplicar la telemedicina. Sin embargo, desde el punto de vista jurídico existe un poco de preocupación al respecto. ¿Por qué?
 
En diálogo con EDICIÓN MÉDICA, José Ignacio Vallejo, abogado del departamento procesal en DS Legal Group, ha explicado que en el Ecuador existe un vacío regulatorio en este campo y una aparente contradicción de normas. “En la práctica se lo hace (telemedicina), pero tenemos un Código de Ética caduco que dice que es totalmente prohibido”, ha dicho.
 
Según ha indicado, por un lado, el Acuerdo Ministerial 14660 del Ministerio de Salud Pública (MSP) de 1992 establece un Código de Ética Médica, que en el literal F del artículo 101 prohíbe a los médicos dar consultas e indicar tratamientos a través de cualquier medio de comunicación.
 
Por otro, el Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (Mintel), a través del Plan de la Sociedad de la Información y del Conocimiento 2018-2021, contempla a la Telemedicina como una de las nuevas formas de ejercer la Medicina e insta a que sea de inmediata aplicación social. De esta manera, ha dado camino para que se instaure formalmente, lo cual no ha sucedido hasta ahora.
 
“La misma OMS (Organización Mundial de la Salud) también ha manifestado su postura y ha sido a favor de la Telemedicina. Ellos creen que es necesario instaurarla y practicarla día a día por muchos motivos”, ha agregado.
 
Por lo tanto, Ecuador debe tratar de esclarecer inmediatamente esta aparente contradicción para que se pueda dar tranquilidad a los profesionales de la salud y a los mismos pacientes, que ya hacen uso de esta herramienta de la medicina. Para esto, Vallejo ha propuesto crear un proyecto de ley, crear algún acuerdo ministerial o reformar la Ley Orgánica de Salud.
 
Sin embargo, el abogado ha lamentado que todavía no exista ninguna iniciativa de proyecto de ley relacionada con la telemedicina, y que la Asamblea esté “impávida” ante esta situación.
 
Los asambleístas deberían dar apertura para crear, en conjunto con la comunidad médica y sociedad civil, esta normativa que sería de gran ayuda para los profesionales de la salud. “Hay que darles la tranquilidad para que puedan trabajar bajo sistemas nuevos, electrónicos y digitales”, ha enfatizado.
 
“Tenemos que cambiar el chip, y esta es una responsabilidad compartida de todas las instituciones y sujetos que podemos ser beneficiados”, ha destacado.
 
La telemedicina ya se hace en Ecuador
 
A pesar de esta contradicción, varias instituciones y profesionales de la salud ya están desarrollando telemedicina en el país, antes de la pandemia y durante la misma, hasta la presente fecha.
 
Vallejo ha señalado que el Hospital Vicente Corral Moscoso (HVCM) de Cuenca del MSP es un caso exitoso de este campo. En esta casa de salud se han instalado equipos y sistemas electrónicos para instaurar de manera progresiva y objetiva la telemedicina, cumpliendo con todos los estándares necesarios para aplicarla.
 
“Esto deja entrever que esta herramienta se encuentra permitida tácitamente”, ha sostenido.

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