Edición Médica

11 por ciento afirma haber tenido ideas suicidas.

Redacción. Quito
El número de suicidios en médicos y estudiantes de Medicina es alarmante. Ariel Alarcón, docente y psiquiatra de la Universidad de Rosario en Bogotá, ha indicado que según un estudio publicado en Medscape News, “el riesgo de suicidio en médicos y profesionales de la salud es el doble a la tasa de la población en general. Actualmente, la cifra de suicidios en el mundo pertenece al 4 %, en médicos es del 8 % y las mujeres cuadriplican la cifra”.

El médico colombiano ha señalado que la tasa de suicidios en médicos hombres es 8 por ciento mientras que en mujeres la cifra se cuadruplica.  También ha resaltado que los médicos son propensos a sufrir estrés y depresión debido a los turnos extensos en horas, agotamiento laboral, relaciones con sus pacientes, entre otros.

“Las personas que debemos trabajar con otros seres humanos que están sufriendo física y emocionalmente. Nos afectamos y si no se sabe manejar, podemos llegar a enfermarnos", ha expuesto Alarcón.

Otros datos compartidos por el psiquiatra indican que el 45 por ciento de médicos a nivel mundial han asegurado estar agotados, 11 por ciento haber tenido ideas de suicidio, 10 por ciento expresó síntomas de depresión y 4 por ciento ha intentado quitarse la vida.

En cuanto a los estudiantes de medicina, Alarcón ha resaltado que “la carga de trabajos y los niveles de estrés que maneja un estudiante de medicina, ocasiona que presenten depresión y deseos suicidas”.

El Instituto Nacional de Salud Mental de Colombia ha manifestado que la tasa de suicidio en el país es de 5 por cada 100 habitantes.

Campañas preventivas

Como parte de las iniciativas para combatir este problema mundial, en 2016 el cardiólogo australiano Geoff Toogood inició el movimiento Crazy Socks 4 Docs, campaña que busca enfrentar el estigma y discriminación que los médicos tienen para hablar de sus problemas de salud mental.

El objetivo de la campaña es crear un espacio de diversión, a través del uso de prendas divertidas, además de la organización de charlas, foros y eventos de comunicación, en las que los médicos puedan sentirse libres de verbalizar sus problemas y desahogarse junto a otros colegas. 

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