Estimulación Magnética Transcraneal demuestra mejoras en niños con autismo
La terapia también se ha mostrado efectiva en casos de depresión
José Cruz.
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Cristina Coello. Quito
El ecuatoriano
José Cruz, ha presentado en la convención internacional de estimulación magnética transcraneal de Vancouver (Canadá) los resultados positivos en el seguimiento a niños con diagnóstico de
trastorno del espectro autista.
Cruz ha señalado a REDACCIÓN MÉDICA que tras un seguimiento de entre 3 y 21 meses a 21 niños de 3 a 5 años ha demostrado que la estimulación magnética transcraneal (EMT) les ha proporcionado “
mayor conciencia del del entorno, mejor interacción social y mayor tolerancia a los ruidos”.
Este seguimiento “de más de 175 meses, además de demostrase beneficioso (en la patología),
no evidenció ningún efecto secundario adverso”, ha asegurado Cruz.
El especialista ha insistido en que
“no hay cura para el autismo”, pero este tipo de terapia no farmacológica les permite a los pacientes mejorar su condición, sin prescindir de sus medicamentos, en caso de que los utilicen.
Depresión:
Cruz también ha resaltado esta terapia no invasiva
en casos de depresión, donde tampoco ha registrado efectos secundarios y cuya recomendación está indicada principalmente a pacientes
intolerantes a los antidepresivos
La terapia
La EMT es un procedimiento no invasivo que
utiliza campos magnéticos para estimular las células nerviosas en el cerebro.
Durante una sesión de EMT,
se coloca una bobina electromagnética sobre el cuero cabelludo, cerca de la frente. El electroimán emite pulsos magnéticos sin causar dolor que estimulan las células nerviosas en la región del cerebro que controla el estado de ánimo.