Edición Médica

Miembros de la Plataforma por la Salud y la Vida.

Redacción. Quito
El  Foro de Salud Pública del Ecuador, integrante de la Plataforma por la Salud y la Vida, ha aclarado que “no tiene ninguna relación con el ‘Frente por la Salud y la Vida’ conformado por la Red de Profesionales de Salud afines al partido de Gobierno”.

Según el organismo, este comunicado se da en respuesta a algunos correos recibidos por parte de profesionales sanitarios en los que se pide una aclaración.

“Son por demás notorias las pretensiones malsanas que están detrás de esta nominación, que no sólo intenta confundir a la opinión pública sino tergiversar los objetivos por los cuales se conformó la Plataforma” ha sostenido el comunicado.

Además, el texto puntualiza que “el historial de nuestras publicaciones nos exime de profundizar en algún justificativo, pues es evidente que hemos sido permanentemente críticos al accionar del gobierno y particularmente del Ministerio de Salud Pública, en aquellos temas en los cuales no hemos coincidido, pero también es necesario puntualizar que hemos presentado oportunamente propuestas que por obvias razones no han sido tomadas en cuenta por la autoridades de turno”.

Su postura frente al COS

La Plataforma por la Salud y la Vida, así como cada uno de sus colectivos y organizaciones sociales, respaldamos la posición de la Federación Médica Ecuatoriana (FME) referente al Código Orgánico de Salud, tarea que la hemos sostenido cerca de cuatro años, y que hoy el Ministerio de Salud Pública junto a la Asamblea Nacional pretenden que sea aprobado en una carrera estrepitosa y excluyente.

“Una década ha transcurrido sin que el objetivo de tener un Sistema Nacional de Salud se haya cumplido, y a última hora, en medio de un escenario electoral totalmente viciado, lo quieren lograr sin contemplaciones técnicas y menos aún éticas”, ha sostenido.

La comunidad sanitaria del Ecuador que trabaja con mística y honestidad, sabrá reconocer en esta intención, un acto más de los repudiables que atentan contra el derecho a la Salud, que no son sino un flagrante atentado contra la vida de todos los ecuatorianos y ecuatorianas.

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