Edición Médica

Alfredo Luna, internista y cardiólogo.

Jonathan Veletanga. Quito
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), en Ecuador las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte y, entre sus principales factores de riesgo, se encuentran la obesidad, sobrepeso, niveles elevados de colesterol y triglicéridos, hipertensión arterial, dislipidemia, diabetes, etc.
 
Para prevenir estas patologías es importante un cambio en los estilos de vida, no obstante, en aquellos pacientes en los que la obesidad y sobrepeso son un factor de riesgo cardiovascular creciente, varias sociedades médicas de todo el mundo han considerado a la cirugía bariátrica como la mejor opción (más información aquí) para perder peso de manera sostenida y definitiva, ha explicado a REDACCIÓN MÉDICA, Alfredo Luna, médico internista y cardiólogo.
 
“La cirugía bariátrica revierte alteraciones cardiacas derivadas del sobrepeso y la obesidad”. Por ejemplo, mediante este procedimiento se puede prevenir la enfermedad coronaria especialmente en pacientes diabéticos, la hipertensión arterial, la dislipidemia. Además, disminuye la probabilidad de padecer un infarto ya que los factores de riesgo asociados a la enfermedad cardiovascular disminuyen. Entre los beneficios que conlleva se destacan la normalización de la presión arterial, disminución de los niveles de colesterol y triglicéridos, y su efecto metabólico más importante, la remisión de la diabetes mellitus tipo 2, entre otros, ha sostenido el especialista.
 
“La Asociación Americana de Diabetes (ADA, por sus siglas en inglés) declaró en este año que la cirugía metabólica debe recomendarse como una opción para tratar la diabetes tipo 2. Existe abundante evidencia de que la cirugía metabólica, comparada con los cambios en el estilo de vida y las intervenciones médicas, es superior en el control glicémico y en la reducción de factores de riesgo cardiovasculares en pacientes con diabetes tipo 2 y obesidad”, ha agregado.
 
Por estas razones, Luna ha considerado que todo paciente que presente diabetes tipo 2, sobrepeso u obesidad puede considerar la cirugía bariátrica como una alternativa terapéutica, si buscan perder peso sostenidamente, sin efecto rebote (más información aquí); disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y, sobre todo, aumentar su esperanza de vida.
 
Sin embargo, ha recordado que previo a una cirugía bariátrica, todo paciente debe pasar por un chequeo cardiológico, donde se determinen las condiciones generales del paciente al momento de someterse a este procedimiento. Aunque, ha señalado que el tener una condición, como ser hipertenso, no es impedimento para realizarse esta cirugía.
 
Resultados en la prevención de enfermedades cardiovasculares
 
En su experiencia Luna ha logrado constatar que, mediante la cirugía metabólica, “muchos pacientes diabéticos tipo 2 fueron curados (aquí más información) y otros mejoraron significativamente su control de la enfermedad”.
 
Además, los pacientes que tenían hipertensión arterial también mejoraron significativamente y muchos de ellos no necesitaron la medicación antihipertensiva después de la intervención. Mientras que aquellas personas que se sometieron a cirugía de pérdida de peso, presentaron un 70 por ciento menos de probabilidades de tener un ataque al corazón, ha detallado el especialista.
 
Por ello, Luna ha asegurado  que la cirugía metabólica es una opción terapéutica “efectiva” para la diabetes mellitus tipo 2, incluso en pacientes no obesos.

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