MEDIANTE COMUNICADO
Sociedad de Medicina Familiar: es injusta la sanción en el Caso Mazoyer
Han expresado su solidaridad y respaldo al médico Carlos López y su familia
Carmen Elena Cabezas, presidente de la SEMF.
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Jonathan Veletanga. Quito
La Sociedad Ecuatoriana de Medicina Familiar (SEMF), a través de un comunicado, ha expresado su solidaridad y respaldo a Carlos López, médico cirujano, y su familia por la “injusta sanción puesta en el Caso Mazoyer”.
Carmen Elena Cabezas, presidente de la SEMF, ha comentado a REDACCIÓN MÉDICA que se solidarizan con el médico y su familia porque consideran que en este caso no se tomaron en cuenta todos los antecedentes del paciente y sobre todo que el galeno (Carlos López) hizo lo que más pudo para salvarle la vida.
“Las condiciones previas no dieron para que la paciente sea salvada oportunamente. Por este motivo percibimos que
la sentencia fue innecesaria. Carlos López fue juzgado por gente que no tienen una real comprensión de lo que sucede en el medio hospitalario”, ha dicho.
Para Cabezas los médicos deberían ser juzgados por gente
capacitada en Salud, que conozca todos los ámbitos que se deben tomar en cuenta para que la salud se conserva. “El médico no es el único dueño de la salud del paciente, tanto el sistema de salud, como la educación al paciente y los diferentes determinantes sociales hacen que un persona viva, se cure o muera”, señaló.
En este sentido la SEMF rechaza los actos de criminalización y la violación del debido proceso. Además hace votos para que se siga el debido proceso legal, tomando en cuenta el
derecho de presunción de inocencia según contempla la Constitución y Declaración Universal de Derechos Humanos.
Cabezas ha invitado a los integrantes de la SEMF y a los médicos en general a que participen en el “
Plantón y Marcha por la libertad del Dr. Carlos López” que se realizará este 19 de enero con el fin de solidarizarse con el médico cirujano.
El dato
La tarde del 12 enero
Carlos López fue detenido para que cumpla una sentencia de 12 meses en prisión en la
cárcel 4 de Quito. En 2009 fue acusado de negar atención a una paciente con múltiples heridas por arma de fuego que había ingresado de urgencia en la Clínica Pichincha. Según la demanda, el galeno le habría negado la atención por no presentar una tarjeta de crédito como garantía.