Edición Médica

Pedro Barreiro, vicepresidente de la Corporación Ecuatoriana de Escritores Médicos.

Jonathan Veletanga. Quito
Un buen médico también puede ser un buen escritor gracias a su experiencia y su formación, ha dicho a REDACCIÓN MÉDICA Pedro Barreiro, vicepresidente de la Corporación Ecuatoriana de Escritores Médicos.

Según su explicación a través de la literatura se puede difundir el conocimiento médico no solo a otros profesionales de la salud sino también hacia a toda las personas. Para esto tienen experiencia, pues desde que se inician en la Medicina simplificar el leguaje médico a uno más compresible a través de los ensayos clínicos y las historias médicas.   

En este sentido ha señalado que los profesionales de la salud tienen una ventaja para incursionar en la literatura, ya que los galenos se entrenan para realizar ensayos médicos, publicaciones científicas y sobre todo escribir buenas historias clínicas para que los tratamientos sean eficaces.

Para Barreiro la historia clínica, que es una herramienta esencial para todos los servicios de salud, “es como una pequeña novela” por ser un documento escrito coherente, entendible y fidedigno que relata todos los antecedes de un paciente para entender su situación actual.  

En este marco ha indicado que en Ecuador existen un grupo de escritores médicos que no solo realizan publicaciones médicas sino también literatura.

Este movimiento no es nuevo en el país, ya que los galenos han realizado un aporte importante a la literatura ecuatoriana desde la época pre republicana, por ejemplo Eugenio Espejo, Plutarco Naranjo, Rodrigo Fierro, entre otros escritores médicos son los más representantes de este movimiento.

Actualmente uno de los restos para los profesionales de la salud es escribir ensayos clínicos y literatura. Sin embargo esta corriente crece de a poco, es así que la Corporación Ecuatoriana de Escritores Médicos está por extenderse a las provincias de Imbabura, Azuay y Manabí porque hay médicos interesados en incorporarse al movimiento.

Barreiro ha sugerido a los galenos que quieran escribir ensayos clínicos o literatura estar abiertos a las críticas porque es la única forma de mejorar. La formación y la experiencia son claves para empezar a escribir libros y publicaciones científicas, ha concluido. 

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