Edición Médica

Víctor Álvarez, presidente del CMP.

Jonathan Veletanga. Quito
El Colegio de Médicos de Pichincha (CMP) ha expresado su preocupación frente a la confirmación de dos pacientes con la variante delta del virus SARS-CoV-2, por ello ha hecho un llamado para promover varias medidas preventivas que ayudarán a reducir su propagación dentro del país.
 
“Todavía no tenemos los datos de las muestras enviadas por la Secretaría de Salud hacia la Universidad San Francisco. Estamos esperando la confirmación de la presencia de más pacientes con esta variante”, ha dicho Víctor Álvarez, presidente del CMP.
 
Álvarez ha recordado que hace 15 días aproximadamente ya advirtieron que la variante delta podía estar en Quito, pues se había registrado un aumento de casos, el índice de positividad había subido a 26.9 por ciento y se registraba un incremento de pacientes jóvenes en Cuidados Intensivos y camas hospitalarias, incluyendo a niños.
 
“Estamos viendo que han aumentado los casos de pacientes menores de 50 años”. La semana pasaba se había manifestado que, hasta el 13 de julio, en el Hospital Eugenio Espejo el 32 por ciento de las camas de Cuidados Intensivos estaban ocupadas por personas menores de 50 años.
 
“El corte que hicimos ayer (21 de julio) ya nos revela una situación más crítica, más del 50 por ciento de las camas son utilizadas por personas menores de 50 años. Tenemos un paciente de 21 años, tenemos pacientes de 23, 25, 36, 37, 43 y 49 años. Hemos tenido informes de compañeros de otras unidades, como el IESS Quito Sur, donde también hay un incremento de estos pacientes, con la particularidad de que la sintomatología ya no demora, a los pocos días los pacientes se encuentran en situación grave, crítica e incluso fallecen”. Lo mismo está sucediendo en clínicas privadas, ha detallado el galeno.  
 
Para Álvarez, estas situaciones hacen suponer que en Quito ya está la variante delta. “Pero este no es motivo para crear miedo y pánico en la población”, esto debe incentivar la implementación de acciones preventivas, más no reactivas. “Este momento para aplicar las medidas preventivas en todo el país, tomando un supuesto de que la variante delta ya está en cada una de las provincias”.
 
Por este motivo, el CMP ha solicitado aplicar varias medidas: disminución del aforo en ambientes abiertos y cerrados, así como ha exhortado el COE Nacional; disminución al 50 por ciento del aforo en el transporte público; que el Ministerio de Trabajo aplace por 30 días el regreso al trabajo presencial; reducir la brecha de vacunados con una sola dosis; que se impulse una campaña de motivación para la vacunación contra COVID-19; masificación de pruebas y testeo; hacer más análisis genómicos de las variantes del SARS-CoV-2; campañas de educación masiva para el fortalecimiento de las medidas de bioseguridad y contención de la pandemia.
 
“Es necesario que exista una disciplina, responsabilidad y una solidaridad de las medidas de contención. No es el momento de relajarnos, es el momento de que el Gobierno de manera muy responsable manifieste a la población que estamos viviendo un momento crítico. Si no actuamos de manera conjunta: Gobierno, sectores de la salud y comunidad, para hacer un proceso de contención, la transmisibilidad de estas variantes puede ocasionar una respuesta mínima del sistema sanitario”, ha enfatizado Álvarez.
 
“Es el momento de no relajarnos, de mantener las medidas de bioseguridad, de apoyar el plan de vacunación, ir a vacunarnos, de asumir esa responsabilidad por nuestra familia, nuestra comunidad… Debemos mantener con responsabilidad las medidas de bioseguridad, si la población no se relaja vamos a poder disminuir la transmisibilidad”, ha insistido el galeno.

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