Edición Médica

Médicos de hospitales de Quito.

Jonathan Veletanga. Quito
“El país está viviendo una situación crítica en materia de salud. Señor Presidente esta es una de las épocas más nefastas, más críticas para la salud pública en el país. Literalmente se nos están cayendo los hospitales aquí, en la capital de la República, y eso no puede ser. No puede ser que no haya autoridad que avoque conocimiento del tema y nos ayude a solucionar esta cuestión”, así inició una rueda de prensa el presidente del Colegio de Médicos de Pichincha (CMP), Carlos Cárdenas.
 
Cárdenas ha sido enfático en señalar que el Gobierno debe ya solucionar definitivamente el problema de desabastecimiento de medicamentos, insumos y equipamiento, que “conspiran el trabajo de los médicos”.
 
“Ya no podemos seguir así. Y no se trata de traer médicos extranjeros para que solucionen nuestros problemas. Nuestro país cuenta con la suficiente cantidad y calidad de profesionales de la salud para que dirijan los hospitales. Es hora de sacar a esos mandos medios que tanto daño le han hecho a la salud pública… Es hora ya de tomar decisiones firmes, pensando en el futuro y en la salud de nuestro pueblo”, ha sentenciado el galeno.
 
Actualmente “hay dos hospitales que se están cayendo”, uno de ellos es el Pablo Arturo Suárez. Si embargo, esta situación se replica en hospitales a nivel nacional, ha informado el CMP.
 
Juan Barriga, representante de las Asociaciones de Médicos de Hospitales de Quito del Ministerio de Salud Pública, ha sostenido que los médicos “no podemos trabajar” debido a la falta de insumos, ni materiales para los pacientes.
 
“Tenemos pacientes hospitalizados para ser transferidos a otros hospitales, pero tampoco nos reciben porque no tienen lo necesario, y las casas de convenio tampoco los reciben porque no les pagan”, ha denunciado.
 
Hospital Pablo Arturo Suárez
 
Barriga ha detallado que existen dos informes sobre la funcionalidad de esta casa de salud: uno señala que no debería funcionar y el otro que debe funcionar en un 30 por ciento de su capacidad.
 
En este sentido, ha agregado que la falta de insumos se origina, entre otros motivos, por el cambio continuo de gerentes hospitalarios, lo cual interrumpe la ejecución de los procesos de abastecimiento dentro de la casa de salud. Esta situación se agrava cuando se realizan las compras a través del sistema del Sercop.
 
“Nosotros como Hospital Pablo Arturo Suárez tenemos tres gerentes en lo que va del año… Cambian de gerente (frecuentemente) porque no tienen políticas de salud; son políticos que ponen a dedo a los gerentes y no pueden tener continuidad. Si cambian el gerente, tenemos que empezar nuevamente hacer todos los procesos”, ha dicho.
 
Esta situación es similar en otras casas de salud a nivel nacional, por ello ha asegurado que más representantes de hospitales de otras provincias se sumarán a este reclamo. “Hay una crisis hospitalaria que hay que conocerla y que hay que denunciarla”, ha enfatizado.
 
Hospital Docente de Calderón
 
En esta casa de salud hay alrededor de 300 cirugías represadas. Asimismo, tiene varios problemas: no tiene equipos, ni insumos y medicamentos, las torres de Laparoscopía no funcionan, las torres de Endoscopía y Colonoscopía tampoco. “Estamos en un momento súper grave y ya no podemos trabajar”, ha relatado Carolina Del Salto, presidenta de la Asociación de Médicos del Hospital General Docente de Calderón.
 
Hospital Enrique Garces
 
“Este es un mal general, nacional, tanto en los hospitales del MSP como los del Seguro Social”, ha resaltado Byron Noroña, presidente de la Asociación de Médicos del Hospital Enrique Garcés.
 
El galeno ha señalado que en este hospital está en una etapa crítica. “No tenemos radiología, laboratorio, insumos, medicamentos, dispositivos”, además presenta un colapso hidrosanitario. Lamentablemente, ninguna autoridad ha solucionado algún problema, por ello está en “crisis”.

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