Presentan nuevo protocolo de atención para mordeduras de serpientes y picadura de alacrán
Este manual actualiza el presentado en 2010
Ronald Cedeño, subsecretario de Vigilancia de la Salud subrogante.
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Cristina Coello. Quito
El
Ministerio de Salud Pública (MSP) iniciará los próximos días la implementación del nuevo protocolo de atención de
mordeduras de serpientes y picadura de alacrán, ha informado a REDACCIÓN MÉDICA,
Ronald Cedeño, subsecretario de Vigilancia de la Salud subrogante.
“Se dará énfasis en la
región Amazónica y en Costa ya que son las dos zonas donde existe mayor cantidad de serpientes, pero se socializará el documento
en todo el país ya que este manual es para todos los profesionales de la salud”, ha explicado Cedeño.
La novedad de este documento es que
incluye acciones sobre la picadura de alacrán. Para la elaboración el protocolo se ha contado con la colaboración de varios especialistas no solo del MSP y la red pública, sino también docentes universitarios y expertos del Ministerio de Ambiente.
Según el funcionario, la población “aún tiene
muchos mitos respecto a la mordedura de serpiente en ciertos lugares rurales, pero esas acciones atrasan el tratamiento del paciente y son las que generalmente ocasionan ciertas discapacidades” al perder miembros o mueren.
De allí que este año, con el nuevo manual, se busca además “
aumentar la notificación y tener datos de la incidencia real de mordeduras de serpiente porque a pesar de ser un evento de notificación obligatoria todavía hay muchos casos que como MSP no nos enteramos”, ha añadido el subsecretario.
Las mordeduras de serpientes son frecuentes “sobre todo
en la temporada invernal porque son arrastradas con las corrientes de agua y eso las acerca a las comunidades”, ha explicado.
Sobre el manual
El documento es “muy didáctico”, contiene imágenes de las serpientes y alacranes, la ubicación común de estos animales en Ecuador, “para que el personal sepa qué tipo de animales podrían enfrentar y cuáles serían las
características y manifestaciones de los efectos que causan” su mordedura o picadura, ha señalado Cedeño.
Desde el 2010 no se ha publicado una actualización del manual, pero en este último se explica, por ejemplo, el uso del antídoto (suero antiofídico), “que anteriormente lo producíamos en el país y hoy se importa.
Hay variación en la dosificación y eso es importante que lo conozcan los profesionales de la salud”, ha dicho el funcionario.
También se incluye una
diferenciación entre los tipos de serpientes, que generalmente son las que causan alteraciones en la coagulación de la sangre y las que producen problemas neurológicos.
En este manual se ha incluido la mordedura de la
serpiente Coral “que no produce hemorragia, pero genera un proceso tóxico en el cerebro”, ha advertido Cedeño.