Edición Médica

La LUZ es una institución centenaria en Maracaibo.

Redacción. Quito
Un grupo cada vez más numeroso de profesionales ecuatorianos y colombianos han decidido continuar sus especialidades en Venezuela, aprovechando la crisis y el considerablemente bajo costo de la educación.
 
Maestrías y doctorados en Medicina, Odontología, Veterinaria, Ingeniería, Derecho, Humanidades y Agronomía son las de mayor demanda en la Universidad del Zulia (LUZ) en Maracaibo, fronteriza con Colombia.
 
José Antonio Chirinos, director de Relaciones Interinstitucionales de la Universidad del Zulia, ha señalado en un comunicado que “la internacionalización de su oferta académica” es un “objetivo estratégico y prioritario” por lo que se ha establecido convenios con universidades ecuatorianas para la formación de sus profesores en estudios de posgrado.
 
Los profesionales interesados en cursos de cuarto y quinto nivel académico hallan en las universidades públicas de Venezuela una combinación perfecta de matrícula muy económica y educación, a pesar de la crisis.
 
Un doctorado en la LUZ puede costar unos 1.500 dólares cada semestre, la inscripción 500, a lo que suman otros 1.000 de gastos de vuelos, hospedaje, alimentación y transporte cada vez que viajan a Maracaibo. Es decir que al final de sus estudios harán una inversión de entre 8 y 10 mil dólares.
 
Una colegiatura y los viáticos de un doctorado en Perú oscila entre los 28 y 30 mil dólares. En Colombia y Chile, los cursos cuestan unos 40.000 y en Ecuador superan los 30 mil.
 
Mary Carmen Rincón, decana de la Facultad de Odontología, también ha señalado en un comunicado de la universidad venezolana que “debido a la política educativa de Ecuador y a que las universidades de ese país no tienen estudios doctorales, nuestra Universidad del Zulia se ha convertido en una universidad pionera y con una oferta de calidad, porque aparecemos en la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (Senescyt), como una de las universidades que cumple con estándares de calidad para poder cursar este tipo de estudios”.
 
Rosa Raaz, coordinadora de Doctorados de la Facultad de Agronomía ha mencionado que en 2017 “hubo un boom" de estudiantes de los dos países en la LUZ, "hubo dos cohortes con 33 estudiantes ecuatorianos de universidades de Manabí, Machala y Guayaquil, también de empresas privadas, solo en Agronomía".
 
Paliar las carencias
 
La experiencia ha sido también económicamente beneficiosa para la Universidad del Zulia, una institución centenaria que depende del Estado venezolano y cuyas autoridades se quejan de un déficit presupuestario.
 
Los ingresos por estudios de postgrados permiten a las facultades de LUZ reparar su infraestructura, pagar salarios a los docentes participantes o adquirir equipos.
 
Medicina es una de las carreras con mayor demanda. Hay en ella al menos 600 ecuatorianos y colombianos entre especialidades y doctorados, según Freddy Pachano, médico cirujano pediatra y director de Postgrado de esa facultad.
 
La firma de una decena de convenios interinstitucionales con las universidades ecuatorianas “no solo permite el fortalecimiento e internacionalización de los programas de posgrado, sino que también representan un aporte económico para paliar las carencias de recursos de las facultades”, ha añadido la decana de Odontología.
 
La participación de médicos sudamericanos ha sido tal que está a punto de igualarse a la de venezolanos. Este año, se censaron 120 extranjeros y 170 profesionales locales solo en las especialidades.

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