SE REALIZAN INVESTIGACIONES
Ranas ecuatorianas son potenciales para fabricar biomedicinas
Ecuador tiene el 9% del total de especies de anfibios en el mundo
María Dolores Guarderas, coordinadora del Centro Jambatu.
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Redacción. Quito
El Ministerio de Ambiente de Ecuador (MAE) y el Centro Jambatu, de investigación y conservación de anfibios, han iniciado una serie de investigaciones en ranas para fabricar biomedicinas contra enfermedades como el Alzheimer.
El proyecto ‘Conservación de la diversidad de anfibios ecuatorianos y uso sostenible de sus recursos genéticos’ se desarrollará hasta el 2020 con la con la cooperación de la Universidad Ikiam y el Bioparque Amaru.
De acuerdo a información del MAE, en la primera fase se colectarán los especímenes que se han considerado para la investigación. Posteriormente, los animales serán estudiados en los laboratorios de los centros académicos con los que se mantiene alianza para la ejecución de la iniciativa.
María Dolores Guarderas, coordinadora del Centro Jambatu, ha señalado que para crear biomedicinas se tardará entre 20 y 30 años, por lo que es pertinente iniciar con los estudios.
Por su parte Miguel Sáenz De Viteri, subsecretario de Patrimonio Natural del Ministerio del Ambiente, ha señalado que el propósito de estas investigaciones es acceder a recursos genéticos y los beneficios provenientes de su utilización, lo que corresponde a prioridades del país en relación con la conservación de especies.
“Contamos con un porcentaje importante de la biodiversidad mundial, lo que genera un compromiso. Conscientes de este potencial, y preocupados por las cifras de peligro de extinción, estamos desarrollando e impulsando proyectos como este”, comentó.
Pablo Larco coordinador nacional de este proyecto, ha explicado que Ecuador posee cerca de 600 familias de ranas, de las cuales 550 ya identificadas. “Esto número representa casi un 9 por ciento del total de especies de anfibios en el mundo”.
“De las 550 especies, el 50 por ciento (275) están dentro de la áreas protegidas por el Estado, 234 son endémicas y no se encuentran en ninguna parte del mundo. Además 186 se encuentran en alguna categoría de riesgo de extinción, a causa del cambio climático, enfermedades infecciosas y pérdida de hábitat”, ha indicado.
Según ha dicho “el papel que juegan estos animales para el desarrollo de la biomedicina es importante. En una especie de anfibio, por ejemplo, se pueden encontrar más de 200 moléculas con características y actividades biológicas potenciales para la fabricación de fármacos de interés mundial”.
Para el MAE este proyecto de conservación de anfibios propicia la investigación adecuada para “descubrir compuestos derivados de la secreción de la piel de estos animales, con fines terapéuticos”.