Edición Médica

Román Turró.

Jonathan Veletanga. Quito
En los últimos 5 años la Endoscopia Bariátrica se ha convertido en una opción terapéutica muy útil para los pacientes que sufren obesidad, por eso es importante compartir los conocimientos y la experiencia con colegas de todo el mundo, ha enfatizado Román Turró, reconocido médico endoscopista de España, quien fue uno de los profesores del curso de entrenamiento ‘hands on’ de Endobariatría, realizado en Quito y organizado por la Clínica SOM.
 
Turró junto a su equipo multidisciplinario es pionero en muchas de las técnicas actuales de Endobariatría desde la Unidad de Endoscopia Digestiva, Metabólica y Bariátrica del Centro Médico Teknon de Barcelona, que dirige.
 
“En Barcelona somos pioneros de una técnica que se llama procedimiento MEGA. Es una técnica que hace 3 años inventamos en nuestra unidad y que ahora estamos empezando a propagar por el resto del mundo “, ha manifestado el especialista en entrevista exclusiva con EDICIÓN MÉDICA.
 
Por este motivo, en Quito se realizó el lanzamiento del protocolo MEGA a nivel de Latinoamérica, con el objetivo de que Clínica SOM y otras unidades que manejan pacientes con obesidad puedan disponer de esta intervención y tecnología en los próximos meses.
 
“El procedimiento MEGA es un sistema de plicatura gástrica (endoscópica)” que permite hacer una remodelación de la anatomía del estómago similar a la que se haría con una cirugía bariátrica. “Pero, a diferencia del quirúrgico, en el endoscópico no hacemos incisiones ni amputamos el órgano”. De esta manera se optimizan los beneficios para los pacientes, ha explicado.
 
Esta intervención es la evolución de una técnica original que se llama POSE, la cual se realiza en varios países del mundo, incluyendo Ecuador, en la Clínica SOM. Gracias a sus óptimos resultados a mediano y largo plazo en los pacientes con obesidad (que ya han siso científicamente comprobados) se está diseminando rápidamente, ha sostenido.
 
Para implementar este tipo de procedimientos se necesitan cumplir tres requisitos principales: tener una Unidad de Endoscopía Bariátrica que cuente con un equipo multidisciplinario; que los especialistas se certifiquen para realizar la intervención; y contar con las certificaciones correspondientes para el uso del dispositivo tecnológico, ha detallado.   
 
“Ahora es muy importante hacer las cosas bien, dar evidencia científica y enseñar las buenas prácticas. Por ello estamos aquí… Estoy 100 por ciento seguro que dentro de los próximos 5 o 10 años, la primera línea del tratamiento de la obesidad va a ser la Endoscopia y probablemente como segunda línea la cirugía porque es lo que demanda la sociedad y los pacientes”, ha resaltado Turró.
 
Por esta razón, el galeno ha invitado a involucrarse en el campo de los procedimientos mínimamente invasivos para disponer de los mejores tratamientos para sus pacientes. “El mundo se mueve por el interés y las ganas, y si hay ganas hay resultados. En Ecuador tienen una magnífica referencia, de manera que a partir de aquí puede sumar sus ideas”.

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