40% de personas en Latinoamérica padece rinitis alérgica
Esta enfermedad afecta la calidad de la vida de los pacientes
Las cifras de subdiagnóstico no dejan de parecer alarmantes.
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Redacción. Quito
La rinitis alérgica (RA) es una condición que afecta aproximadamente el 25 por ciento de los niños y el 40 por ciento de los adultos en todo el mundo. En Latinoamérica,
su incidencia es del 37.6 por ciento, la población más estudiada está entre los 6 - 7 años y 13 - 14 años.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 400 millones de personas sufren de rinitis alérgica,
las cifras de subdiagnóstico no dejan de parecer alarmantes, ha explicado
Dania Lokee, medical manager de Sanofi Consumo para COPAC.
Estas cifras se traducen en el
empeoramiento de la calidad de vida de los niños y adolescentes. En esta población, la rinitis alérgica desencadena otros problemas como alteración del sueño y somnolencia diurna, ausentismo escolar, irritabilidad e inquietud, falta de concentración, alteraciones en el estado de ánimo y dificultades en las relaciones interpersonales.
Cuando la rinitis alérgica afecta notablemente la calidad de vida de la persona (niño o adulto), es vital
asistir al médico general, pediatra, otorrinolaringólogo, alergólogo o neumólogo, dependiendo de las comorbilidades.
¿Por qué se produce? Las causas son varias y
tienen que ver con la exposición, como por ejemplo el contacto con la caspa de mascotas, el polen, el moho, el polvo, los ácaros y la contaminación, según varios estudios.
Uno de los problemas es que
muchas personas no saben que tienen rinitis alérgica, lo cual puede generar otras enfermedades si no es tratada a tiempo, como asma. En este sentido, se estima que el 94 por ciento de los pacientes con asma padecen rinitis alérgica.
“El correcto tratamiento de una rinitis alérgica puede
disminuir el riesgo de visitas al cuarto de urgencias y hospitalizaciones por asma. Los padres de familia y cuidadores deben tener en sus mentes esta relación, con el objetivo de actuar a tiempo y abordarla de forma correcta”
, ha indicado
Lokee.
En este contexto, para el tratamiento existen
antihistamínicos de segunda generación, que son ideales para manejar adecuadamente la rinitis alérgica en medio de las ocupaciones diarias. Estos ayudan a no afectar la calidad del sueño de la persona y no provocar somnolencia en su rutina diaria (tanto para niños como para adultos).
Estos fármacos también son usados para
urticaria crónica idiopática (aparición persistente de ronchas en el cuerpo).