Edición Médica

Para reducir la transmisión hay que movilizar a las comunidades.

Redacción. Quito
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha recomendado a los países de las Américas intensificar la preparación de los servicios de salud para diagnosticar y manejar casos de chikunguña, ya que están aumento los casos en algunas zonas de la región.
 
Durante el 2022, en la región de las Américas se ha registrado incrementos en el número de casos y defunciones por chikunguña por encima de lo notificado en los años anteriores. Esta tendencia se ha mantenido a lo largo de las primeras semanas del 2023. Adicional, varios países de la Región, especialmente del Cono Sur, tendrán un aumento de la temperatura, por lo que, dependiendo de su magnitud e impacto en las áreas endémicas de las arbovirosis, podría constituir una carga adicional de estas enfermedades para los sistemas de salud en las zonas afectadas.
 
Según la alerta epidemiológica de la OPS, en 2021 se notificaron más de 137.000 casos y 12 defunciones, sin embargo, en 2022 se reportaron casi el doble de casos (271.176) y 95 fallecimientos en 13 países y territorios de la región, la gran mayoría en Brasil. Además, en las primeras cuatro semanas de 2023, se han reportado 30.707 casos (alrededor del 70 en Paraguay) y 14 defunciones. En Ecuador aún no se han notificado casos.
 
La fiebre chikunguña se transmite por mosquitos Aedes, los cuales también transmiten dengue y Zika. Puede causar fiebre alta, dolor en articulaciones, dolor muscular y cefalea. No hay vacuna aprobada y tampoco tratamiento específico. En raras ocasiones, puede provocar síntomas graves y llevar a la muerte, principalmente en embarazadas, menores de 1 año, adultos mayores y personas con comorbilidades.
 
“La mejor protección frente al chikunguña consiste en evitar la picadura de mosquitos. El principal método para reducir la transmisión consiste en movilizar a las comunidades para reducir y eliminar los criaderos de mosquito. Ante la primera sospecha de infección por chikunguña, se recomienda acudir de inmediato a la unidad de salud”, ha precisado la OPS, en un comunicado.
 
Frente a este panorama, la OPS ha instado a continuar con el fortalecimiento de la vigilancia, triaje, diagnóstico y tratamiento oportuno de los casos de chikunguña y otras enfermedades transmitidas por mosquitos.
 
Por ejemplo, ha pedido intensificar las acciones de preparación y adecuación de los servicios de salud, organizar el tamizaje y el flujo de pacientes, reorganizar servicios en caso de brotes y fortalecer las redes de atención.
 
En este contexto, las orientaciones para vigilancia incluyen recomendaciones sobre la toma apropiada de muestras y los algoritmos de laboratorio para confirmación del diagnóstico mediante pruebas moleculares (RT-PCR), teniendo en cuenta además el diagnóstico diferencial con otras patologías.
 
Asimismo, ha recomendado cuidados específicos que deben brindarse a los pacientes en los diferentes niveles de atención y fases de la infección, y que pueden requerir capacitar al personal de salud sobre la sospecha diagnóstica y el manejo de casos.
 

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