Edición Médica

Arturo Quizhpe, director de ReAct Latinoamérica.

Jonathan Veletanga. Quito
Cuenca se ha convertido en la primera ciudad del Ecuador en implementar y promover el uso de la “Alforja Educativa”, una herramienta didáctica de salud y educación, mediante la cual se enseña a las niñas y niños temas relacionados con promoción y cuidado de la salud, basado en la estrategia niño a niño y con un enfoque “Madre Tierra Una Sola Salud”.
 
Se ha evidenciado que las niñas y niños tienen un “rol protagónico” en la promoción y desarrollo de la salud, por ello desde hace 30 años un grupo de pediatras, comunicadores, artistas, entre otros actores de Cuenca, iniciaron a trabajar en conjunto bajo una “visión multidisciplinaria e interdisciplinaria”, ha recordado Arturo Quizhpe, director de ReAct Latinoamérica, en el marco del Taller Intersectorial de Evaluación y Planificación ‘Hacia el encuentro internacional minga por los 10 años de la Alforja Educativa: un puente entre salud y educación’.
 
De esta manera, se han aliado médicos, educadores, estudiantes de Ciencias de la Salud, artistas, comunicadores, entre otros, para desarrollar proyectos educativos significativos, ligados al aprendizaje de la Ciencia mediante actividades cotidianas y en relación al curriculum escolar. Así nació, hace 10 años, la ‘Alforja Educativa: un puente entre salud y educación’, que prioriza la enseñanza del mundo microbiano, además del uso apropiado de antibióticos para combatir la resistencia antimicrobiana, alimentación saludable, etc.
 
Si bien esta herramienta nació en Cuenca, a lo largo de los últimos años se ha extendido a varias partes del mundo: Argentina, Bolivia, El Salvador, Perú, Kenia y Brasil (se está traduciendo al portugués para su implementación). Ahora, a través del Consejo Cantonal de Salud de Cuenca, se ha implementado en 11 unidades educativas municipales, y 94 docentes han sido capacitados para su uso con los estudiantes.  
 
Es decir, serán las primeras escuelas promotoras de salud que promueven la salud de todos y todas, de los maestros, las niños y niñas, y sus familias. “La Alforja Educativa justamente nos permite este concepto”, ha enfatizado Quizhpe.
 
“Este programa nació aquí, creció aquí y retorna nuevamente a la ciudad de Cuenca para ir hacia todas las escuelas… También hay universidades que están interesadas en utilizar nuestra herramienta”, ha agregado.
 
Por su parte, Julio Molina, director del Consejo Cantonal de Salud, ha destacado que creen “firmemente” en la propuesta de la Alforja Educativa porque proporciona materiales y herramientas prácticas para la enseñanza del mundo microbiano, así como la concientización social del problema de salud pública de la resistencia a los antimicrobianos.
 
“El señor ministro de Salud (José Ruales) nos pidió que los contenidos de la Alforja se los haga llegar para poderlos difundir en todos los rincones del país”, ha asegurado Molina.
 
Para Molina, la Alforja Educativa es una propuesta que ayudará a fortalecer el entendimiento de la relación entre la salud humana y la salud de los ecosistemas, además de promover acciones reales para tener estilos de vida saludables y desarrollar las capacidades físicas, emocionales e intelectuales.
 
¿Qué es la Alforja Educativa?
 
Silvina Alessio, coordinadora del Proyecto ‘Alforja Educativa’, ha explicado que se trata de un “puente” entre la salud escolar y el mundo microbiano. Para ello se han generado varios materiales e instrumentos didácticos (impresos, digitales y audiovisuales) que ayudan a realizar promoción de la salud, prevención de enfermedades infecciosas y concientización sobre la resistencia a los antibióticos.  
 
Asimismo, a través de este programa se han trabajado 5 ejes: formación de formadores (capacitaciones para promotores y docentes de unidades educativas municipales de Cuenca); participación en espacios infantiles para enseñar temáticas sobre agua, antibióticos, aire, alimentos, mundo bacteriano y resistencia bacteriana; uso de esta herramienta en centros educativos y organizaciones comunitarias; desarrollo de proyectos de investigación en universidades; y difusión de todos los contenidos, ha detallado.
 
Alessio ha considerado que se trata de una oportunidad para que todo el Ecuador pueda ver la importancia de este proyecto en diferentes espacios y se pueda expandir a otras ciudades. “Acá hay un espacio para el que quiera estar”, ha sostenido.
 
El dato
 
Durante el Taller Intersectorial de Evaluación y Planificación ‘Hacia el encuentro internacional minga por los 10 años de la Alforja Educativa: un puente entre salud y educación’, se ha presentado la nueva edición de la Alforja Educativa, la cual ha sido elaborada por el Consejo Cantonal de Salud, ReAct Latinoamérica y la Fundación Niño a Niño.
 
Este insumo será entregado a cerca de 3.000 docentes de Cuenca y enviado al ministro de Salud José Ruales y a su equipo técnico de salud.

Silvina Alessio, coordinadora del Proyecto Alforja Educativa.

Representantes y docentes de unidades educativas municipales de Cuenca.

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