Edición Médica

José Hernán Masache, presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Anticoncepción.

Jonathan Veletanga. Quito
En 2020 el Ecuador ha registrado 44.891 nacidos vivos de niñas y adolescentes de entre 10 a 19 años. Esto evidencia una disminución de 6.820 infantes respecto al año anterior, cuando se registraron 51.711 nacidos vivos de “mujeres adolescentes”, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

Nacidos vivos por grupos de edad. Comparación años 2020 y 2019. Fuente INEC.

 
Se han reportado 1.631 nacidos vivos de niñas de 10 a 14 años, lo cual corresponde a una tasa de 2 nacidos vivos por cada 1.000 niñas de ese rango de edad. Esto significa que hubo una disminución de 185 nacidos vivos en comparación al 2019. 

Tendencia de los embarazos en niñas de 10 a 14 años en los últimos años. Fuente INEC.

Las provincias de Morona Santiago, Los Ríos y Esmeraldas son las que más nacidos vivos de niñas de 10 a 14 años registran, cuentan una tasa de nacidos vivos de 4.9, 4.0 y 4.6, respectivamente, muy superior a la tasa nacional (2.0).
 
Esta tendencia a la baja también se observa en adolescentes de 15 a 19 años. En este rango de edad se han registraron 43.260 nacidos vivos, que corresponde a una tasa del 54.6 nacidos vivos por cada 1.000 adolescentes. En paragón al 2019, hubo una disminución de 6.635 nacidos vivos.

Tendencia de los embarazos en niñas de 15 a 19 años en los últimos años. Fuente INEC.

 
Las provincias con las tasas más altas de nacidos vivos por cada 1.000 adolescentes de 15 a 19 años son Los Ríos (80.8 nacidos vivos), Napo (74.4 nacidos vivos) y Morona Santiago (73.1 nacidos vivos).
 
En 2020 además hubo un decrecimiento de defunciones fetales: en total se registraron 1.437 muertes, de estas el 0.6 por ciento (9 fallecimientos) ocurrieron en niñas de 10 a 14 años (1 más que en 2019) y el 13.8 por ciento (199) en adolescentes de 15 a 19 años (103 menos respecto al 2019).

Izquierda: Tendencia de defunciones fetales en Ecuador. Derecha: muertes en 2020 por grupos de edad.

 
Para José Hernán Masache, presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Anticoncepción y miembro de la Sociedad Ecuatoriana de Ginecología y Obstetricia de Pichincha, los embarazos adolescentes siguen siendo un problema de salud pública muy importante para el país porque en los últimos años se han incrementado, y de manera más pronunciada en niñas de 10 a 14 años.  
 
Otra situación preocupante es que “hay menores de 14 años que ya tienen dos hijos, adicional hay una cifra muy grande de menores de 19 años tiene más de dos hijos. Entonces, es importante no solo prevenir el primer embarazo sino también los embarazos subsecuentes”, ha agregado el galeno.
 
En el marco del Día Mundial de la Prevención del Embarazo en Adolescentes, Masache ha reiterado que el embarazo adolescente afecta tanto a nivel biológico como psicológico, económico y social, ya que trunca el proyecto de vida. Por ello ha enfatizado en la necesidad de que la sociedad y el Estado trabajen articuladamente para ir cambiando este panorama.
 
“Si todos trabajamos conjuntamente podremos hacer intervención temprana, educación sexual en la edad escolar, programas de mejora social para que el embarazo no sea el plan de vida de las mujeres, generar justicia para eliminar la impunidad en los casos de abusos sexual. Si articulamos estos cuatro ejes podríamos intervenir de mejor forma para prevenir los embarazos”, ha insistido.
 
El galeno también ha señalado que los médicos deben educar a las mujeres para que puedan optar por un método anticonceptivo seguro, con el fin de que puedan prevenir los embarazos no deseados.

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