Edición Médica

Martha Guerra, investigadora de la Flacso.

Diego Mosquera. Quito
Martha Guerra, investigadora de la Flacso, ha manifestado a REDACCIÓN MÉDICA que en muchas poblaciones rurales del Ecuador el rol de las parteras aún no se ha definido con claridad, debido al gran desconocimiento que existe sobre su trabajo.

Guerra ha sostenido que el diálogo entre la Biomedicina y la Medicina tradicional aún se encuentra en proceso de construcción y que es necesario pensar en una forma de hacer Salud diferente en la que se integren los conocimientos tradicionales.

En una investigación realizada por el departamento de interculturalidad de la Flacso enfocada a los nacimientos que se realizan en las poblaciones rurales se ha revelado que en el Ecuador los partos realizados por parteras han disminuido en relación a los nacimientos en hospitales.

Al respecto el estudio ha mostrado que la biomedicina, en algunas ocasiones, subvalora los conocimientos de la propia madre sobre su cuerpo y  la sabiduría de las parteras. “Se acusa a las personas que atienden partos en las comunidades de desconocimiento sobre nacimientos” ha señalado el texto.

Por otro lado, el documento ha destacado que entre los dos sistemas existen tensiones relacionadas con el temor de coordinar el trabajo para encontrar respuestas de manera conjunta, “un problema importante para que esto se realice de manera adecuada es la rotación del personal de Salud ya que una vez instaurado el diálogo se cambian de profesionales, además no se tiene claro quién corre con las responsabilidad en el caso de una complicación”, ha indicado la investigación.

En este sentido, Guerra ha explicado que otro de los problemas encontrados es el adecuado agendamiento de citas médicas para las futuras madres, ya que el personal que atiende a las mismas no tiene el tiempo suficiente para garantizar la calidez y la calidad de la consulta.

“Médicos entrevistados nos han dicho que casi la mitad del tiempo de atención se va en llenar formularios, que si bien aporta en la estadística no da el tiempo para ser cálidos con las madres”, ha añadido.

Según la investigación, en el Ecuador aún no se tiene un registro completo de las parteras que atienden en las comunidades rurales.

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