Edición Médica

Catalina Yépez Silva, epidemióloga.

Jonathan Veletanga. Quito
Actualmente Ecuador registra una circulación muy reducida de COVID-19, no obstante, vive una situación “compleja” debido al brote inusual de dengue y leptospirosis provocado por la época invernal fuerte.
 
Para Catalina Yépez Silva, epidemióloga, médica salubrista, lo complejo radica en que las enfermedades vectoriales como el dengue y chikungunya, además de la leptospirosis (endémica en el país), tienen sintomatología muy similar cuando se presentan cuadros clínicos leves (fiebre, dolor de cabeza, malestar general, dolores musculares), es decir, en un primer momento pueden confundirse una con la otra, incluso con una gripe común o una intoxicación alimentaria, dependiendo la provincia en la que una persona se encuentre.
 
Por ejemplo, “si está en cualquiera de las provincias de la Costa, usted tiene una sintomatología leve y se puede pensar que es dengue, chikungunya o puede pensar incluso que es una intoxicación alimentaria o que se resfrió y le dio gripe”, ha dicho la especialista en entrevista con EDICIÓN MÉDICA.
 
En este contexto, ha considerado que las características del invierno provocan un “riesgo importante” de contraer estas enfermedades, por ello ha pedido a la ciudadanía en general y comunidad médica estar atentos.  
 
“Es importantísimo poner atención a los signos y síntomas, no automedicarse y siempre existe la posibilidad de solicitar una prueba de anticuerpos IGM, que dice si es que se estuvo expuesto recientemente al virus de la chikungunya o la bacteria de la leptospirosis”, ha recomendado.
 
Precisamente por esta situación, ha opinado que el reto actual para la autoridad sanitaria es reforzar la vigilancia epidemiológica y la comunicación de riesgo. También debe preparar al Sistema de Salud con los medicamentos suficientes y la capacidad instalada porque siempre hay casos que ameritan hospitalización.
 
“Es un panorama muy preocupante porque son muchas enfermedades al mismo tiempo, la mayoría vectoriales, así como otras que están por ahí, pero que no hemos sabido nada más como la viruela símica, la influenza aviar, entre otras”, ha mencionado.
 
Chikungunya
 
Sobre la situación de la chikungunya en el país, Yépez ha considerado que “no debemos despreocuparnos” porque si bien se ha reportado solo un caso importado, existe una alerta epidemiológica temprana de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) debido a que hay casos en varios países de la Región de las Américas.
 
“También es cierto que el mosquito que causa chikungunya es el Aedes aegypti, cuya población es importante en el país, es altísima, y el invierno es el momento propicio para su reproducción”. Por lo tanto, bastan pocos mosquitos portadores del virus para que se genera un brote, ha explicado.
 
Asimismo, deben preocupar las secuelas que deja esta enfermedad en los casos que no se diagnostican a tiempo.

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