Edición Médica

Presidente, Guillermo Lasso y la secretaria de Derechos Humanos, Bernarda Ordóñez.

Redacción. Quito
El presidente Guillermo Lasso ha firmado un acuerdo para implementar Registro Único de Violencia (RUV), en el marco de la activación del Sistema Nacional de Erradicación de la Violencia de Género, una herramienta que busca frenar el alto índice de violencia contra las mujeres.
 
"No podemos permitir que continúe el alto índice de violencia en contra de las mujeres. Esa es una violación a los derechos humanos”, ha dicho el mandatario quien además recordó que seis de cada diez mujeres han sufrido algún tipo de agresión en algún momento de su vida, y en promedio una muere cada tres días víctima de la violencia.
 
La semana pasada se registró "casi un femicidio diario, además de otros actos de violencia extrema, inclusive en contra de niños", ha añadido Lasso, antes de anotar que durante la pandemia, el ECU 911 recibió, en un mes, 10.000 llamadas de auxilio por violencia intrafamiliar.
 
"Eso es en promedio 334 diarias, cuatro llamadas por minuto. Es una cifra que refleja niveles espeluznantes de decadencia social", ha comentado el mandatario.
 
En ese sentido, el gobierno ha considerado oportuno activar el Sistema Nacional Integral para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres, un organismo que articula a 22 instituciones para coordinar múltiples acciones, entre ellas prevenir, atender, sancionar, erradicar la violencia y reparar los derechos vulnerados de las mujeres.
 
Se da forma al registro único de violencia
 
Una de las herramientas que pondrá en marcha ese sistema es el registro único de violencia (RUV), que será un mecanismo de alerta temprana y posibles riesgos de mujeres que se encuentran en círculos de violencia.
 
Para estructurarlo el gobierno se ha puesto como plazo un año y se ha comprometido a dotar de información y recursos humanos y económicos a las instituciones para que este sistema funcione.
 
Según el mandatario, éste es un tema "de prioridad uno. Una deuda social que ningún Gobierno del pasado se ha interesado en pagarla. Sin embargo, este gobierno empezará a hacerlo con firme voluntad política", ha recalcado tras agradecer a la Unión Europea y a la ONU por apoyar la luchar contra la violencia de género.
 
Lasso ha asegurado que el RUV será "el mejor registro en Suramérica" y apuntó que la violencia de todo tipo en contra de las mujeres no solo tiene consecuencias sociales sino también económicas.
 
Según la ministra de Gobierno, Alexandra Vela, el RUV es un registro sobre víctimas de violencia y victimarios en tiempo real, operable e interconectado para tener alertas que permitan prevenir e impedir el femicidio.
 
"No podemos fallar porque nuestra demora puede significar vidas de mujeres perdidas para siempre", ha declarado Vela.
 
El RUV permitirá determinar la situación nacional en la materia, con el objetivo de planificar y poner en ejecución políticas y estrategias que refuercen la prevención y la erradicación de la violencia contra las mujeres.
 
Por su parte, Bernarda Ordóñez, secretaria de Derechos Humanos, ha señalado que “hay que pasar del papel a la acción. En 2018 se promulgó la Ley Orgánica Integral para Prevenir y de Erradicar la Violencia contra las Mujeres que establecía que en 6 meses se implemente el RUV, lleva tres años de retraso, pero hoy lo hicimos posible”, se ha ufanado.
 
Los datos de violencia
 
Según un estudio de la Organización y Promoción de la Economía Violenta, el 48 por ciento de mujeres en Ecuador ha perdido su trabajo durante la pandemia, y el 18 por ciento renunció a su trabajo para cuidar a su familia o por miedo al contagio, citó el mandatario.
 
Así mismo, la secretaria de Derechos Humanos ha citado un estudio de la Agencia de Cooperación Alemana (GIZ), según el cual la violencia contra las mujeres "le representa al país 4.600 millones de dólares" y evidencia que el Estado usa más recursos en atención que en prevención.
 
"Hoy en Ecuador, 7 de cada 10 mujeres no tienen un empleo adecuado, es decir que ganan menos que un salario básico en un país en el que la canasta básica sobrepasa los 700 dólares", ha dicho Ordóñez, para quien una de las formas más eficientes para romper con los círculos de la violencia es el empoderamiento femenino.

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