Guillermo Lasso minimiza a la variante Ómicron; la OMS asegura que esa narrativa es engañosa
Genera una falsa sensación de seguridad, lo cual cuesta más vidas
Guillermo Lasso, presidente de la República.
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Jonathan Veletanga. Quito
“Es una molestia contagiarse del COVID con la variante Ómicron, pero es como una gripe fuerte… Estamos frente a una variante controlada, controlable, que no es mortal y
que no está llevando ni siquiera a saturar las camas en los hospitales del Ecuador”, ha dicho el presidente de la República,
Guillermo Lasso, en el enlace radial ‘Encontrémonos por la Ciudadanía’, al referirse al aumento de los contagios en varias ciudades del país.
Según el criterio del primer mandatario, actualmente la COVID-19 “ya no es mortal” como a inicios de la pandemia por varios factores (vacunación, medidas de bioseguridad y medidas de prevención). Por ejemplo, “en el año 2021 llegábamos a 43 fallecidos por cada 1.000 contagiados,
hoy no se llegan ni siquiera a 1, por lo tanto la población está protegida”, ha expresado.
Frente a estos factores, el COE está tomando “
medidas de precaución para evitar el incremento de contagios”, como por ejemplo, suspender las clases presenciales una semana más, entre otras. Por ende, ha descartado el que se vuelva a decretar un nuevo confinamiento.
Estas declaraciones han sido cuestionadas por el experto de datos,
Carlos Oporto. En su cuenta de Twitter, a través de dos tweets, ha exhortado al mandatario a no utilizar a la ligera estos datos e información. “Nuevamente sus asesores le mienten por quedar bien.
O usted bien sabe la situación actual y nos miente”.
Por su parte, este 18 de enero, en rueda de prensa el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS),
Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha enfatizado que
es peligroso y engañoso posicionar el mensaje de que la variante ómicron es leve, puesto que en este momento “sigue arrasando en el mundo”, generando un impacto negativo en los trabajadores de salud, que ya están agotados, así como en los sistemas sanitarios que están “sobrecargados”.
“Ómicron puede ser menos grave, en promedio, por supuesto, pero la narrativa de que es una enfermedad leve es engañosa,
perjudica la respuesta general y cuesta más vidas. No se equivoquen, Ómicron está causando hospitalizaciones y muertes, e incluso los casos menos graves están inundando las instalaciones de salud. El virus está circulando con demasiada intensidad y muchos siguen siendo vulnerables. Para muchos países, las próximas semanas seguirán siendo realmente críticas para los trabajadores de la salud y los sistemas de salud”, ha enfatizado Tedros.
Por este motivo, el funcionario ha exhortado a todos a hacer lo posible para reducir el riesgo de contagio e
ir aliviando la presión de los sistemas sanitarios.
Para la OMS, es posible reducir el impacto de la ola actual de manera significativa, si se utilizan las herramientas de salud pública que sabemos funcionan. “En tiempos de Ómicron sigue siendo más importante que nunca,
vacunar a los no vacunados”, ha reiterado Tedros.
“Las vacunas pueden ser menos efectivas para prevenir la infección y la transmisión de Ómicron que para las variantes anteriores, pero
siguen siendo excepcionalmente buenas para prevenir enfermedades graves y la muerte. Esto es clave para proteger a los hospitales de verse abrumados.
A criterio de Tedros, “esta pandemia está lejos de terminar y con el increíble crecimiento de Ómicron a nivel mundial,
es probable que surjan nuevas variantes, por lo que el seguimiento y la evaluación siguen siendo fundamentales”.