ATENCIÓN OPORTUNA
Hay que romper el mito de que el cáncer de mama es un problema de mujeres mayores
Cualquier mujer puede estar en el grupo de riesgo
Gina Watson, representante de OPS en Ecuador.
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Cristina Coello. Quito
A propósito del mes de la conciencia del cáncer de mama, la representante de la Organización Panamericana y Mundial de la Salud (OPS/OMS) en Ecuador,
Gina Watson, ha señalado a REDACCIÓN MÉDICA, que ha llegado la hora de
romper el mito de que el cáncer es un problema solo de mujeres de mayor edad.
“Rompamos el mito de que el cáncer de mama es un problema de mujeres de edad mayor. Mujeres de 20 o 25 años
mueren por diagnósticos tardíos”, ha advertido.
De allí que ha enfatizado en el importante
rol que cumple la atención primaria especialmente, donde el diagnóstico temprano puede ser la diferencia entre la vida y la muerte de una mujer.
“En la medida en que podamos identificar el cáncer de mama en los primeros estadíos, la probabilidad de cura mediante
cirugía, quimioterapia o radioterapia es sumamente alta. El
problema es cuando el diagnóstico se hace tardíamente y el acceso al tratamiento es aún más complicado, lo que deteriora aún más la condición de la mujer y reduce sus posibilidades de sobrevida”, ha explicado la representante.
Watson, siendo ella también sobreviviente de este tipo de enfermedad, ha hecho un llamado a las mujeres y al personal sanitario a
promover la prevención, ya que el en el caso del cáncer de mama, es una de las causas más frecuentes de
muertes evitables en mujeres de nuestra región.
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Desde que la mujer inicia su vida sexual y reproductiva debe ser sujeta a las medidas de prevención y control temprano. Con eso toda joven debe conocer primero
su historia familiar, qué antecedentes de cáncer de mama hay en las mujeres de su familia”, incluidas hermanas, abuelas y tías, ha explicado.
Lo segundo es “aprender
hacerse un autoexamen manual de sus mamas para poder
detectar cualquier modificación cambio o sospecha de alteración” y, tercero, “lo recomendable es
hacer una mamografía”, examen que no solo está dirigido a mujeres por arriba de los 40 y 50 años, sino a todas quienes lo requieran según lo prescriba el médico.
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Toda mujer que llega a una consulta debería ser educada y orientada. Cualquier alteración que pueda sentir desde la contextura de la mama, no necesariamente tiene que ser un nódulo, puede ser un pequeño
endurecimiento, inflamación, dolor que no es usual dentro de la estructura de la mama debe ser
motivo de consulta”, ha insistido Watson.
En la medida en que una mujer conoce a profundidad su cuerpo “puede sentir e identificar muy rápidamente desde una pequeña inflamación. Eso
hace la diferencia en su calidad de vida, sobre el futuro de su salud sexual y reproductiva y sobre todo es la diferencia entre la vida y la muerte”, ha considerado Watson.