Edición Médica

Katiuska Borja, dermatóloga del Hospital Los Ceibos.

Cristina Coello. Quito
El área de Dermatología del Hospital Los Ceibos del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) ha implementado un nuevo tratamiento a base de toxina botulínica para los pacientes con hiperhidrosis, ha informado la institución.
 
Katiuska Borja, responsable de Dermatología, ha señalado a REDACCIÓN MEDICA que el tratamiento deriva en una mejor calidad de vida para los pacientes, tras la aplicación de  inyecciones con la toxina, la cual inhibe la producción de sudor.
 
En lo que va del año, esa unidad ha resuelto esa patología en 20 pacientes y a decir de Borja es un problema de salud “relativamente frecuente”.
 
La especialista estima que en el país, al igual que en el mundo, del 2 al 3 por ciento de la población presenta hiperhidrosis. Las zonas con mayor frecuencia de sudor son las palmas de las manos, planta de los pies y axilas.
 
Borja ha aclarado que hay hiperhidrosis primaria y secundaria, ésta última, tiene una causa etiológica que puede condicionar a la enfermedad. No obstante, “en el hospital Los Ceibos se trata la primaria, que afecta a pacientes menores a 25 años” y con sintomatología más específica.
 
La especialista ha añadido que la curación en realidad “es paliativa” ya que la toxina ayuda a disminuir los síntomas, dependiendo de la respuesta en cada persona. Aun así, “se puede recurrir a otras sesiones”.
 
“La hiperhidrosis tiene escalas de tratamiento, primero nos basamos en los tópicos a base de cloruro de aluminio. En el hospital se aplica la toxina porque tiene efectos más duraderos”, ha detallado la especialista.
 
Estos meses se ha mejorado la calidad de vida de 20 pacientes, ha dicho Borja, quien además, ha detallado que “en algunos casos con una sola sesión se reduce la patología, pero en otros se puede necesitar varias inyecciones”.

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