Edición Médica

Ernesto Peñaherrera, presidente de la SEC.

Cristina Coello. Quito
La hipertensión es considerada un asesino silencioso debido a que rara vez causa síntomas en sus etapas iniciales y muchas personas no han sido diagnosticadas. De allí que es necesaria un amplia capacitación al personal sanitario de atención primaria, a decir de Ernesto Peñaherrera, presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Cardiología (SEC).
 
El directivo ha comentado en REDACCIÓN MÉDICA que la hipertensión “si se la detecta en forma temprana y se la trata correctamente, es posible minimizar” sus daños por lo cual es el principal factor de riesgo modificable.
 
“No se trata simplemente de bajar las cifras de presión arterial sino de disminuir notablemente el riesgo cardiovascular global, con lo cual se llega a una mejor calidad y un pronóstico de vida igual al de las personas que no lo tienen”, ha precisado Peñaherrera.
 
En relación a este punto, el especialista ha admitido que las políticas implementadas por el Ministerio de Salud Pública (MSP) los últimos años contra las enfermedades crónicas no trasmisibles , “han sido fundamentales, anticipadas a otros países, pero todavía falta mucho por hacer”.
 
“Le toca al nuevo gobierno observar varios frentes y el primero es la capacitación de los médicos de atención primaria en todas las enfermedades catastróficas no transmisibles como diabetes, hipertensión, obesidad y dislipidemia. Esas patologías ocupan el 70 a 80 por ciento de atenciones en ese nivel”, ha considerado.
 
A su juicio, luego de ello, hay que “auditar sus atenciones. Muchos pacientes están tomando medicación bajo una mala medición de presión en el consultorio o algunos no la están tomando cuando lo deberían hacer”, ha advertido el representante de la SEC.
 
Además, ha sugerido a las autoridades fomentar en la población la alimentación saludable, disminución del consumo de sal, la actividad física “y todo lo que tiene que ver con prevención cardiovascular como la limitación del alcohol y cigarrillo. Al cambiar eso los réditos económicos se verán en 15 o 20 años”, ha considerado el especialista.

Medición correcta
 
Peñaherrera ha recordado que a propósito del Día Mundial de la Hipertensión, la Sociedad Internacional “estimula la medición de presión ya que habitualmente tenemos errores en el cálculo”.
 
También ha considerado que “los aparatos de mercurio ya no se deben utilizar más y los equipos aneroides tienen mucha inexactitud y por eso hay que estar permanentemente calibrando el aparato. Hoy tenemos dispositivos semiautomáticos o automáticos que han demostrado mayor utilidad y validez en el manejo de los pacientes” con hipertensión.
 
Hipertensión en niños
 
Fernando Aguirre, miembro de la SEC, ha comentado con REDACCIÓN MÉDICA, que en Guayaquil se ha realizado un estudio en niños de 10 a 15 años donde se encontró pre hipertensión en una prevalencia de entre el 9 al 12 por ciento.
 

Fernando Aguirre, cardiólogo.

“Esto es un termómetro de la sociedad y demuestra que la hipertensión no es solo del adulto, sino también de los niños, principalmente sedentarios”, ha alertado el especialista.
 
Aguirre ha recalcado que “la principal causa de hipertensión en niños y adolescentes es el sobrepeso y obesidad. Entonces tenemos un terreno amplio en el cual trabajar”, ha opinado.
 
Para el especialista esa prevalencia “puede subir y en 30 años llegar al 22 por ciento; a los 50 por sobre el 35 por ciento y a los 60 años puede ir sobre 45 por ciento. Paulatinamente seguirá subiendo dependiendo de la década en la que se mida”.
 
Según ha informado el especialista, es necesario “engranar” la política pública con una mejor educación. En ese sentido, según Aguirre, la SEC viene trabajando con maestros de algunas instituciones en Guayaquil donde han capacitado entre otros temas, sobre el semáforo nutricional, las tablas de nutrición, así como una mejor alimentación y estilos de vida.
 
Estadísticas

Uno de cada tres adultos mayores de 25 años sufre de hipertensión arterial (presión elevada), más de 1.000 millones de individuos, de acuerdo al último informe estadístico de la Organización Mundial de la Salud (OPS-OMS).
 
 
En el Ecuador en 2012 la prevalencia de hipertensión arterial medida por la Encuesta Nacional de Nutrición (Ensanut) en la población de 18 a 59 años fue de 9,3 por ciento. En las mujeres es de 7,5 por ciento  y en hombres de 11,2 por ciento.
 
La prehipertensión arterial tiene una prevalencia de 37,2 por ciento, con valores de 27,1 por ciento en las mujeres y 48,0 por ciento en los hombres.
 
En la encuesta Salud, Bienestar y Envejecimiento (SABE II) para adultos mayores, realizada en 2010, mostró una prevalencia de hipertensión en adultos de 60 años de más del 44,4 por ciento.
 
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) en el 2014 se registraron 1.254 defunciones por hipertensión esencial primaria.
 

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