DÍA MUNDIAL DE LA SALUD
La OMS prescribe la adopción de medidas para proteger la salud humana y combatir la crisis climática
El organismo hizo un llamado a los gobiernos, organizaciones, empresas y ciudadanos
El cambio climático también afecta la salud en Ecuador.
|
Redacción. Quito
Bajo el lema “Nuestro planeta, nuestra salud”, la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra el 7 de abril el Día Mundial de la Salud, instando a los líderes mundiales y la población general a realizar
cambios para frenar el calentamiento global.
“La
crisis climática es una crisis de la salud: las mismas opciones insostenibles que deterioran nuestro planeta están provocando la muerte de seres humanos”, ha señalado el director General de la OMS,
Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Por ello ha considerado que “necesitamos soluciones transformadoras para desenganchar al mundo de su adicción a los combustibles fósiles,
reimaginar economías y sociedades centradas en el bienestar y salvaguardar la salud del planeta, del que depende la salud humana”, ha dicho en el día que se conmemora la fundación de la OMS.
El organismo internacional ha reiterado su llamamiento a la acción, pues ha recalcado que el
99 por ciento de las personas respiran aire insalubre, procedente principalmente de la quema de combustibles fósiles.
También se ha recordado que, debido al calentamiento del planeta,
los mosquitos propagan las enfermedades más lejos y más rápido que antes. Los fenómenos meteorológicos extremos, la pérdida de biodiversidad, la degradación del suelo y la escasez de agua provocan desplazamientos de personas y tienen efectos negativos sobre su salud.
Así mismo, “la contaminación y los plásticos llegan hasta los abismos más profundos de nuestros océanos, hasta la cima de las montañas más altas, y se han abierto paso en nuestra cadena alimentaria y en el torrente sanguíneo. Los sistemas que producen alimentos y bebidas altamente procesados y malsanos impulsan una ola de obesidad, provocan el aumento de los cánceres y las enfermedades cardíacas, y generan hasta un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero en todo el mundo. Esta
crisis sanitaria y social compromete la capacidad de las personas para tomar el control de su salud y su vida”, ha advertido la OMS.
A todo eso, se suma que la pandemia de la
COVID-19 ha hecho visibles las fallas de la inequidad en todo el mundo, y ha puesto de relieve “la urgencia de crear sociedades del bienestar sostenibles que no infrinjan los límites ecológicos y que garanticen que todas las personas tengan acceso a herramientas, sistemas, políticas y entornos que salven y mejoren la vida de las personas”, ha señalado un comunicado oficial del organismo.
Por ello, la OMS en un manifiesto para garantizar una recuperación de la COVID-19 saludable y respetuosa con el medio ambiente ha prescrito que “
se proteja y preserve la naturaleza como fuente de salud humana; que se invierta en servicios esenciales, desde agua y saneamiento hasta energía limpia en los establecimientos de salud; que se garantice una transición energética rápida y saludable; que se fomenten los sistemas alimentarios saludables y sostenibles; que se construyan ciudades saludables y habitables; y que se deje de utilizar el dinero de los contribuyentes para financiar sectores contaminantes”.