Edición Médica

Ana Delgado, directora ejecutiva de ACHPE.

Jonathan Veletanga. Quito
En Quito no solo los servicios públicos de salud atienden en su máxima capacidad a los pacientes con CoVID19, también las instituciones de la red privada atraviesan días muy complicados por la alta demanda de atención sanitaria.
 
“La situación es muy compleja. Nuestras instituciones están al límite de su capacidad, tanto en los servicios de Emergencia como de hospitalización y de UCI para CoVID19”, ha informado a EDICIÓN MÉDICA Ana Delgado, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Clínicas y Hospitales Privados del Ecuador (ACHPE).
 
Las clínicas y hospitales privados de Quito tienen en conjunto alrededor de 50 camas UCI, las cuales se encuentran ocupadas en su totalidad por pacientes CoVID19 y por pacientes con otras patologías, según datos de ACHPE.
 
Delgado ha explicado que al momento tanto la Red Pública Integral de Salud (RPIS) como la Red Privada están al límite, es decir, no disponen de camas libres en UCI, lo cual es un problema porque siguen llegando pacientes con CoVID19 que necesitan cuidados intensivos o, a su vez, “nuestros pacientes que están en hospitalización se complican y requieren UCI”.
   
Asimismo, ha recalcado que a pesar de todos los esfuerzos realizados por incrementar la capacidad hospitalaria en Quito, actualmente la RPIS ya no tiene capacidad para recibir a pacientes CoVID19 derivados desde las casas de salud privadas, según el acuerdo inicial entre ACHPE y la autoridad sanitaria nacional. "Nosotros tampoco tenemos capacidad para aceptar a los pacientes con CoVID19 derivados porque estamos al límite, y porque además debemos atender a los pacientes públicos que se autoderivan”.
 
A su decir, la disponibilidad de camas en Quito es problema que se ha vuelto más grave en las últimas semanas, y ha hecho que se generen listas de espera de pacientes que necesitan entrar a UCI tanto en las instituciones de la RPIS como en las privadas, ha sostenido la directora ejecutiva ACHPE.

El presidente de la Federación Médica Ecuatoriana (FME), Santiago Carrasco, coincide con Delgado en que los espacios de la red privada también están llenos y que su situación está en “límites críticos”.
 
Para el galeno, la red privada se ha involucrado desde un inicio en esta emergencia sanitaria, brindando atención a los pacientes con otras patologías. Sin embargo, por el incremento de contagios en la capital, desde hace algunas semanas han abierto sus servicios para dar “un respiro” a todas las instituciones públicas que atienden a los pacientes CoVID19.
 
Llamado a las autoridades y comunidad

Ana Delgado ha hecho un llamado a las autoridades para que den un nuevo enfoque a las campañas de educación y prevención que están realizando.
 
Ha considerado que es necesario encontrar una nueva forma para llegar a toda la ciudadanía y posicionar en la comunidad tres medidas claves: mantener el distanciamiento físico, adoptar siempre las medidas de cuidado (uso de mascarilla, lavado de manos y desinfesción permanente), y acudir al centro de salud más cercano apenas presenten síntomas leves.
 
Esto ayudará a prevenir los contagios y evitar que los casos se vuelvan graves y, por ende, que requieran UCI, un elemento que al momento no está totalmente disponible en la ciudad, ha concluido.

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