Edición Médica

Hospital auditado.

Redacción. Quito
La Dirección de Auditoría Interna del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) ha examinado 54 procesos de contratación para la compra de fármacos, insumos y equipos médicos en unidades médicas, por un valor total de 15.943.716 de dólares. De esta manera ha encontrado “anomalías en los documentos de respaldo que presentaron los contratistas para la adjudicación de los contratos”.
 
Por su parte, la Contraloría General del Estado (CGE) ha aprobado 17 informes con indicios de responsabilidad penal (IRP) entre enero y abril de 2023, como resultado de tres exámenes especiales que se han ejecutado en hospitales del IESS en Manta, Babahoyo y Guayaquil. Los documentos han sido enviados a la Fiscalía General del Estado.
 
Durante las auditorías se ha identificado que varios proveedores han presentado certificados de su experiencia y capacidad para cumplir con los objetivos de los contratos, cuya autenticidad no fue reconocida por las empresas que constan como emisoras de los documentos.
 
En el Hospital General de Manta, entre 2019 y 2021, se han realizado tres procesos de contratación por un monto total de 697.166 dólares, para adquirir fármacos y dispositivos médicos. Los oferentes han presentado actas de entrega-recepción, contratos y certificados de autorización para comercializar los productos, pero los representantes legales de las compañías que supuestamente elaboraron los documentos han informado a los auditores que no los emitieron.
 
En el Hospital General del IESS de Babahoyo, entre enero de 2018 y junio de 2022, se ha contratado a ocho proveedores que presentaron autorizaciones para distribuir y comercializar medicamentos, insumos y dispositivos médicos, de 20 empresas que también negaron la autenticidad de los certificados. El informe de auditoría también ha revelado que se han adjudicado contratos a otras tres compañías que no cumplieron los parámetros establecidos en los pliegos, afectando los principios de legalidad, trato justo e igualdad.
 
En el Hospital del Día Efrén Jurado López de Guayaquil, el equipo de auditoría ha determinado que los respaldos de la experiencia de los oferentes y de su personal técnico, presentados en ocho procesos de contratación, efectuados en 2021 y 2022, tampoco son legítimos.
 
Otras irregularidades
 
La Contraloría ha informado que en el Hospital General de Manta también se ha establecido que las comisiones técnicas, encargadas de evaluar las ofertas para 14 contrataciones, permitieron la continuidad de los concursos de proveedores que incumplieron con la experiencia general y específica mínima, especificaciones técnicas, personal, registros sanitarios, certificados de distribución, permisos de funcionamiento, certificados de buenas prácticas de manufactura, así como certificados de buenas prácticas de almacenamiento, distribución y transporte. 
 
En este hospital también se ha detectado que un 85 por ciento de medicamentos caducados no han sido canjeados por falta de gestión.
 
En el Hospital General de Babahoyo las falencias en la evaluación de las ofertas hicieron que 11 contratos se adjudiquen a proveedores que no cumplieron con los requisitos exigidos en los pliegos y que se descalifique a cuatro contratistas que sí se ajustaron a los parámetros sin justificación.
 
En esta casa de salud además se han identificado faltantes por 463.813 dólares en los inventarios de dispositivos médicos. Asimismo, se han ingresado a la bodega medicamentos e insumos que no cumplieron las normas técnicas de recepción, con registros sanitarios y fechas de vencimiento diferentes a las establecidas en los contratos.
 
Además, se han adquirido dispositivos y fármacos sin considerar las necesidades reales del hospital, ocasionando que estén embodegados y sin rotación hasta por 406 días: medicamentos y dispositivos médicos entregados para canje no han sido devueltos por el proveedor.
 
En el Hospital del Día Efrén Jurado López de Guayaquil también se han adquirido medicamentos sin considerar la necesidad real de la institución y se han encontrado inconsistencias en la contratación de servicio de mantenimiento de equipos médicos.

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