SESIÓN DE LA COMISIÓN
OMS: El uso no médico de fármacos psicoactivos provoca medio millón de muertes cada año
Algunas sustancias que se emplean en Medicina se comercializan de manera ilegal
Martes, 06 de septiembre de 2022, a las 14:27
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
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Redacción. Quito
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha advertido de que el uso no médico de
fármacos psicoactivos provoca cada año
medio millón de muertes en el mundo.
En el marco de la 65 Sesión de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas, el director de la OMS ha recordado que los medicamentos psicoactivos y los “controlados
son esenciales durante las emergencias como, por ejemplo, para tratar a los pacientes gravemente enfermos de la COVID-19 en las unidades de cuidados intensivos".
No obstante, se ha lamentado que muchos estupefacientes, psicoactivos y otras sustancias que se emplean en Medicina se comercializan de manera ilegal
produciendo adicción crónica.
Tedros ha insistido en que esos fármacos son "fundamentales"
para la gestión del dolor, la dependencia de los opiáceos, los trastornos por consumo de sustancias, los trastornos neurológicos, y en enfermedades mentales.
Sin embargo, ha recalcado que la mayor parte de la población mundial sigue careciendo de un
acceso constante a medicamentos controlados seguros y eficaces, necesarios para aliviar el dolor y el sufrimiento, y en algunos casos, para salvar vidas.
"El
acceso a la morfina, esencial para el manejo del dolor y paliativos, no existe en países de bajos ingresos. Además, tres cuartos de los pacientes con epilepsia que viven en los países de ingresos medios y bajos no tienen acceso a la medicación, esencial para evitar crisis", ha lamentado el director de la OMS.
Pero también ha aclarado que la falta de acceso se debe a algunos factores, como la
producción limitada o la percepción errónea del uso médico de los medicamentos psicoactivos.
En ese sentido, el director de la OMS ha destacado las
tres prioridades del organismo para paliar esta situación: hacer que la salud pública y los derechos humanos sean el foco principal del diálogo sobre
políticas de drogas a nivel internacional; cumplir con los compromisos para
mejorar la cooperación internacional, y compartir las experiencias nacionales y las mejores prácticas.