OPS confirma la urgencia de recuperar las coberturas de vacunación infantil en Ecuador
La COVID-19 tuvo un importante impacto en el alcance de la cobertura de vacunación infantil
Jueves, 05 de diciembre de 2024, a las 13:17
Efectos de la pandemia en los menores de cinco años.
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Redacción. Quito
Un reciente estudio, publicado en la Revista de la
Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha confirmado el significativo impacto negativo de la pandemia de
COVID-19 en el programa de inmunizaciones de niños menores de cinco años en Ecuador.
La investigación “
Efectos de la pandemia de COVID-19 en el programa de inmunizaciones de los menores de cinco años en Ecuador”, ha utilizado un enfoque de cohorte retrospectivo con componentes cuantitativos y cualitativos, ha permitido a los investigadores evaluar la provisión, utilización, cobertura y
oportunidad de vacunación durante el primer año de la pandemia.
Los resultados han mostrado que aproximadamente el 50 por ciento de los informantes, que incluyen personal de salud y madres de menores, han percibido una
reducción en la disponibilidad de insumos y personal para el programa de inmunizaciones.
Además, se ha precisado que la demanda de atención disminuyó en un 26 por ciento entre 2020 y 2021, un cambio atribuido principalmente al
temor al contagio por COVID-19 en las unidades de salud. Este miedo llevó a que muchas familias eviten acudir a los
centros de vacunación, afectado gravemente el acceso a la atención.
El estudio también ha destacado que las modificaciones en los horarios de atención y la implementación de
servicios virtuales no fueron bien recibidas por la población, lo que limitó aún más la efectividad del programa.
Como resultado, solo el 50 por ciento de los menores de un año en esa época logró completar su
esquema de vacunación, y la mayoría de las vacunas no se han administrado en los plazos establecidos.
Entre las conclusiones se ha confirmado que la pandemia intensificó la caída en la
cobertura y oportunidad de vacunación, alcanzando niveles subóptimos en la población infantil. Esa situación aumenta el riesgo de que los niños contraigan
enfermedades prevenibles y por tanto representa una grave amenaza para la
salud pública en el país.
Los hallazgos han subrayado la necesidad de implementar estrategias efectivas para
restaurar la confianza en los servicios de vacunación y mejorar la cobertura.