Edición Médica

La OMM ha pedido a los países prepararse y anticiparse a los pronósticos.

Redacción. Quito
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha declarado el inicio de las condiciones meteorológicas del fenómeno de El Niño.
 
“La declaración de El Niño por parte de la OMM es la señal para que los gobiernos de todo el mundo movilicen los preparativos para limitar los impactos en nuestra salud, nuestros ecosistemas y nuestras economías… Las alertas tempranas y la acción anticipatoria de los fenómenos meteorológicos extremos asociados con este importante fenómeno climático son vitales para salvar vidas y medios de subsistencia”, ha dicho Petteri Taalas, secretario general de la OMM.  
 
Por primera vez en siete años, el Niño se ha desarrollado en el Pacífico tropical, generando un escenario para un probable aumento de las temperaturas globales y patrones climáticos y meteorológicos disruptivos, ha señalado en un comunicado.
 
Según su pronóstico, existe un 90 por ciento de probabilidad de que el evento de El Niño continúe durante la segunda mitad de 2023. Además, se espera que sea al menos de fuerza moderada.
 
“La aparición de El Niño aumentará en gran medida la probabilidad de romper récords de temperatura y desencadenar un calor más extremo en muchas partes del mundo y en el océano”, ha manifestado Taalas.
 
De acuerdo a lo informado, El Niño ocurre cada dos a siete años en promedio y los episodios suelen durar de 9 a 12 meses. Se trata de un patrón climático que ocurre naturalmente asociado con el calentamiento de las temperaturas de la superficie del océano en el Océano Pacífico tropical central y oriental. Pero tiene lugar en el contexto de un clima modificado por las actividades humanas.
 
Anticipándose al evento de El Niño, un informe de la OMM publicado en mayo predijo que existe un 98 por ciento de probabilidad de que al menos 1 de los próximos 5 años y el período de 5 años en su conjunto, sea el más cálido registrado, superando el récord registrado en 2016, cuando hubo este fenómeno fue “excepcionalmente fuerte”.
 
El informe de la OMM de mayo también ha señalado que existe un 66 por ciento de probabilidad de que la temperatura global promedio anual cerca de la superficie entre 2023 y 2027, sea temporalmente más de 1.5 °C por encima de la anterior.
 
2016 fue el año más cálido registrado por el “doble golpe” de un evento de El Niño muy poderoso y al calentamiento inducido por los humanos debido a los gases de efecto invernadero. El efecto sobre las temperaturas globales generalmente se desarrolla en el año posterior a su desarrollo y, por lo tanto, probablemente será más evidente en 2024.
 
“Esto no quiere decir que en los próximos cinco años superaríamos el nivel de 1.5 °C especificado en el Acuerdo de París porque ese acuerdo se refiere al calentamiento a largo plazo durante muchos años. Sin embargo, es otra llamada de atención, o una advertencia temprana, de que aún no vamos en la dirección correcta para limitar el calentamiento”, ha mencionado Chris Hewitt, director de Servicios Climáticos de la OMM.
 
Impactos típicos
 
La OMM ha indicado que los eventos de El Niño en general son opuestos a los efectos del fenómeno de La Niña que terminó a principios de 2023; se asocian generalmente con un aumento de las precipitaciones en partes del sur de América del Sur, el sur de los Estados Unidos, el Cuerno de África y Asia central.
 
Sin embargo, también puede causar sequías severas en Australia, Indonesia, partes del sur de Asia, América Central y el norte de América del Sur. Mientras que, en el verano boreal, puede generar huracanes en el Océano Pacífico central/oriental.
 

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