Edición Médica

El plan refuerza el vínculo afectivo entre la madre y el niño.

Redacción. Quito
El servicio de Neonatología del Hospital Vicente Corral Moscoso (HVCM) de Cuenca dispone de 31 cupos para la atención de recién nacidos, de los cuales uno de cada dos pacientes ingresados se beneficia del plan canguro. 
 
Al momento, esta metodología se aplica en pacientes en condición estable con un peso superior a 1.500 gramos; sin embargo, se inició su implementación en los pequeños del área de cuidados intensivos, ha detallado el hospital.
 
Plan Canguro o conocido también como Mamá Canguro, que se aplica en esa unidad de salud desde hace un año y ha permitido disminuir la mortalidad neonatal.
 
Esta metodología ha sido probada desde hace varios años. Se basa en el contacto piel a piel entre madre y bebé, incluida en la lactancia materna, con lo cual se busca mejorar la sobrevida de los recién nacidos.
 
“Esta metodología surgió en Colombia y se aplica desde hace un año en esta casa de salud, como parte de una política pública del Ministerio de Salud, para disminuir la tasa de mortalidad neonatal”, ha recalcado Fabián Siguencia, neonatólogo del hospital.
 
El HVCM ha informado además que el personal está capacitado al cien por ciento para desarrollar el programa, que implica tres puntos fundamentales: alimentación canguro (alimentar con leche materna directa de la madre o mediante sondas),  posición canguro (contacto piel a piel entre madre e hijo durante el mayor tiempo posible dentro de la unidades de neonatología) y canguro extrahospitalario (seguimiento en los hogares), éste último se inició en los últimos meses, con el apoyo de los posgradistas de Neonatología.
 
“Varios son los beneficios que ofrece el programa, tanto para la madre como para el bebé: participación mucho más activa de la madre en el cuidado del bebé, reforzamiento del vínculo afectivo entre la madre y el niño, e impacto positivo de la lactancia materna”, ha resaltado el hospital.

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